El empleo informal en Argentina trepó a 43,2% durante el segundo trimestre de 2025, con un récord de 37,7% entre los asalariados. Según la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, el fenómeno afecta especialmente a jóvenes y profundiza la pobreza en hogares con empleo.
La investigación del Área de Empleo, Distribución e Instituciones Laborales (EDIL) del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), coordinada por los especialistas Roxana Maurizio y Luis Beccaria, revela que 4 de cada 10 trabajadores argentinos tienen empleos sin cobertura laboral, impositiva ni de seguridad social. La comparación interanual muestra un incremento de 1,6 puntos porcentuales en la tasa de informalidad laboral.
El informe también advierte sobre una situación cada vez más visible: la del trabajador que, pese a contar con un empleo, vive en condiciones de pobreza. En el primer trimestre de 2025, el 24% de los ocupados residía en un hogar pobre, cifra que ascendía a 42% en el caso de los informales. Entre los asalariados registrados, en cambio, el indicador era de apenas 12%.
Ingresos insuficientes frente a la canasta básica
El análisis del ingreso laboral individual marca diferencias sustanciales. El 40% de los trabajadores informales percibe salarios inferiores al valor de la canasta básica de bienes y servicios, mientras que esta situación afecta al 5% de los formales. Esto significa que contar con empleo no asegura superar la línea de pobreza en el país.
La incidencia de la informalidad laboral varía según la categoría ocupacional. En el segundo trimestre de 2025, entre asalariados la tasa fue de 37,7%, entre los trabajadores por cuenta propia llegó a 62,5%, y entre los patrones se ubicó en 22,2%. El estudio precisa que los asalariados concentran el 63% del empleo informal, seguidos por cuentapropistas (34%), patrones (2%) y familiares no remunerados (1%).
Los jóvenes son el sector más afectado
La investigación subraya la vulnerabilidad de los jóvenes frente a la informalidad. En el primer trimestre de 2025, el 63% de los trabajadores de entre 16 y 24 años estaba empleado en condiciones informales, es decir, 6 de cada 10. Este nivel supera en 21 puntos porcentuales la tasa global.
El peso del empleo asalariado dentro de la informalidad laboral se relaciona con su importancia en el mercado de trabajo en general, ya que representa el 72% del empleo total en Argentina.
Cinco claves del fenómeno según el informe de la UBA
- El 43,2% de los ocupados es informal.
- Entre asalariados, la tasa fue récord: 37,7%, el nivel más alto desde 2008 salvo en 2022.
- El 42% de los trabajadores informales vive en hogares pobres.
- El 40% de los informales gana menos que la canasta básica individual.
- Los jóvenes de 16 a 24 años registran una informalidad del 63%.
El documento de la UBA deja en claro que la informalidad laboral es un fenómeno estructural y creciente, que se traduce en mayor desigualdad y vulnerabilidad social para millones de personas con empleo en Argentina. (DIB)