Un grupo de ladrones desvalijaron una joyería y, además, demostraron una macabra astucia para actuar sin escrúpulos: para cometer el robo fingieron que uno de ellos tenía una discapacidad.
El episodio ocurrió este martes por la mañana en un local ubicado en avenida 844 N°2508, pleno centro de San Francisco Solano, partido bonaerense de Quilmes, y pudieron conocerse los detalles del accionar ya que la secuencia que quedó registrada por las cámaras de seguridad del comercio.
Primero ingresó uno de los delincuentes, con el rostro prácticamente cubierto por abrigo, un barbijo y una gorra. El empleado de la joyería le mostró distintos modelos de cadenas hasta que, al acercarse a la vidriera, el presunto cliente mostró camaradería al abrirle la puerta del local a una persona que se trasladaba en silla de ruedas con un acompañante.
Una vez que los tres estuvieron dentro del comercio el ladrón que iba en la silla de ruedas se paró y su acompañante sacó un arma de fuego. En la puerta quedó uno de los cacos como campana, donde atajó y agredió a dos clientes que intentaron ingresar.
Rápidamente, los dos integrantes de la banda que quedaron en la joyería redujeron a los comerciantes y cargaron el valioso botín en un bolso. En pocos segundos, salieron corriendo y escaparon en un Toyota Corolla.
En tanto, en declaraciones televisivas, el dueño del local aseguró: “Está liberada la zona. Uno entró en silla de ruedas, sacó, desenvainó, dijo quédense quietos y nos robó”. Y agregó: “Hace diez años nos había pasado, pero había dejado de pasar. Siempre que hay año electoral pasan estas cosas”. (DIB) ACR