El otoño marca el inicio de la temporada alta de cítricos en la Argentina. Naranjas, mandarinas, limones y pomelos abundan en verdulerías y ferias, ofreciendo su mejor versión en sabor, frescura y valor nutricional.
Además de ser accesibles y versátiles, los cítricos son una fuente natural de vitamina C, potasio, antioxidantes, ácido fólico y fibra, nutrientes fundamentales para atravesar el cambio de estación con el sistema inmune fortalecido.
“Las frutas cítricas contribuyen al funcionamiento normal del sistema inmunológico y ayudan a prevenir enfermedades respiratorias típicas del otoño e invierno”, afirma el doctor Jesús Román Martínez, presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación.
Nutrientes clave
Los cítricos incluyen gran cantidad de vitaminas y compuestos imprescindibles para la salud.
- Vitamina C: Es un antioxidante que fortalece el sistema inmunológico y ayuda a prevenir enfermedades.
- Fibra: Contribuye a la salud digestiva y ayuda a mantener la sensación de saciedad.
- Potasio: Es un mineral esencial para la salud cardiovascular y ayuda a regular la presión arterial.
- Vitamina A: Importante para la salud de la visión y el sistema inmunológico.
- Ácido fólico: Es vital para el desarrollo celular y el funcionamiento del sistema nervioso.
- Antioxidantes: Protegen a las células del daño causado por los radicales libres.
- Minerales: Además de potasio, los cítricos contienen calcio, magnesio, fósforo y otros minerales importantes. (DIB)