Los días cálidos son ideales para picnics y asados, actividades en las que se disfruta de la comida al aire libre. Sin embargo, estas ocasiones también presentan riesgos relacionados con la seguridad de los alimentos, especialmente en cuanto a intoxicaciones. Las altas temperaturas, la exposición al aire libre y la falta de higiene pueden facilitar la proliferación de bacterias y otros patógenos en los alimentos.
Para evitar intoxicaciones alimentarias la doctora Paola Caro (MN 113.445), directora médica de vital, destaca recomendaciones para tener en cuenta y no pasar un mal momento después de la comida.
Higiene y conservación
Antes de manipular alimentos, es esencial lavarse las manos con agua y jabón. En caso de no disponer de agua corriente, utilizar toallitas húmedas con alcohol o desinfectantes a base de alcohol.
Asegúrese de que las superficies de trabajo, como mesas, parrillas o utensilios, estén limpias antes de entrar en contacto con los alimentos. Use toallas o servilletas desinfectantes.
Hay que evitar que mascotas o animales se acerquen a la comida, ya que pueden ser portadores de bacterias que pueden contaminar los alimentos.
Es preciso mantener los alimentos perecederos (como carnes, lácteos, ensaladas con mayonesa, etc.) a temperaturas bajas. Utilizar heladeras portátiles con suficiente hielo o conservadores de frío para asegurar que los alimentos permanezcan en un rango seguro (por debajo de 5°C).
Y se debe utilizar recipientes separados para los alimentos crudos (especialmente carnes) y los cocidos, para prevenir la contaminación cruzada. Esto incluye utensilios, tablas de cortar y platos.
Cocción y utensilios
Las carnes deben cocinarse completamente, alcanzando temperaturas internas seguras (por ejemplo, carne de vaca a 70°C y pollo a 75°C).
Cuidado con el tiempo de exposición al calor. No dejar los alimentos cocidos a temperatura ambiente por más de 2 horas. En días calurosos, reducir ese tiempo a 1 hora.
Los utensilios y parrillas, siempre limpios. Hay que asegurarse de que todos los utensilios, como cuchillos, tenedores, espátulas y parrillas, estén limpios antes de ser utilizados. Limpiar los utensilios entre el manejo de alimentos crudos y cocidos es fundamental.
Evitar utensilios contaminados: no utilizar el mismo utensilio o plato para transportar comida cruda y comida cocida, para evitar la contaminación cruzada.
Las bebidas deben siempre mantenerse frías. Además, si se llevan jugos o refrescos, asegúrese de que estén cerrados herméticamente para evitar que se contaminen.
Cuidado con los alimentos no perecederos. El pan, las galletas o las frutas no requieren refrigeración, pero deben mantenerse en envases herméticos para evitar que se humedezcan o contaminen con insectos.
Calor y prevención
En días muy calurosos, es importante evitar la exposición de los alimentos al sol directo por largos períodos. Es recomendable cubrir la comida con una lona o mantenerla en sombra para minimizar el riesgo de crecimiento bacteriano.
Mientras tanto, es fundamental mantener una supervisión constante de los alimentos para asegurarse de que se mantienen a temperaturas seguras.
Los picnics y asados son momentos para disfrutar con familia y amigos. Para hacerlo sin riesgos, debemos recordar mantener una correcta higiene, asegurar la conservación adecuada de los alimentos, cocinarlos adecuadamente y evitar la contaminación cruzada. (DIB)