El presidente Alberto Fernández encabezó este martes un acto junto al gobernador Axel Kicillof desde Campana por el lanzamiento de la producción de motocicletas de la marca india Royal Enfield y volvió a insistir en la responsabilidad social para frenar el avance de la pandemia de coronavirus en el país.
“Tratemos de dejar para más adelante los contactos para divertirnos, para relajarnos, para pasarla bien. Porque es un momento muy difícil”, dijo el Presidente, en línea con los cuestionamientos desde el Gobierno bonaerense a la Ciudad de Buenos Aires por habilitar la apertura de bares y restaurantes al aire libre. “Dejemos el tiempo del encuentro, del esparcimiento social para otro momento. Porque no es este el tiempo”, agregó.
“Entiendo que la vida cotidiana nos exige animarnos a volver al contacto y es una necesidad de muchos. Tratemos de que esos contactos tengan que ver con producir y ganar el sustento diario; y tratemos de dejar para más adelante los contactos para divertirnos, relajarnos, pasarla bien, porque es un momento muy difícil”, dijo Fernández en medio de la tensión con el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta por la caótica apertura de bares y restaurantes en la Ciudad.
E insistió, acompañado por Kicillof: “Aprovecho cada ocasión para llamar a la reflexión. Estamos muy lejos de superar el problema del coronavirus. Dejemos el encuentro y esparcimiento para otro tiempo. No es momento para eso”.
Las imágenes de miles de porteños disfrutando al aire libre en bares y restoranes el fin de semana, en muchos casos sin la distancia social recomendada ni barbijo, motivó un nuevo cuestionamiento de referentes del oficialismo al Gobierno porteño.
Más producción
Respecto de la producción de motos, el mandatario opinó que “es casi una proeza hacer esto en este tiempo”. Y agregó: “Un producto que se hace en Argentina por primera vez fuera de su país de origen, con insumos argentinos y en medio de una pandemia”.
“El tiempo que viene necesita de este coraje y esta confianza. No es un tiempo fácil. Necesitamos de empresarios y trabajadores que se animen, sabiendo el contexto en el que trabajan. Todos queremos que la economía se mueva, pero hay preservar la salud. Podemos hacerlo como lo estamos haciendo, con mucha responsabilidad. Celebro que la industria se mueva. Hay un estado que ayuda a la producción y al consumo. A esto vamos a tener que acostumbrarnos”, sumó.
Según trascendió, el Gobierno ofrecerá planes para la compra de motos de producción nacional con un tope de hasta $150.000 en 36 cuotas fijas. Todavía se estaban ultimando detalles cruciales como la tasa de interés, que sería inferior al 24% anual y el mecanismo para comprar y retirar las unidades de los concesionarios.
En los primeros siete meses del año fueron patentadas 134.525 motos, lo que representó una caída de 37% respecto a igual período del año anterior, según datos de la Asociación de Concesionarios Automotores. (DIB) FD