El fiscal Álvaro Garganta, que entiende en el caso del comerciante platense que mató a tiros a un ladrón de 16 años que entró a robar a su comercio, actuó en legítima defensa y, por lo tanto, no sería imputable.
Garganta, según confiaron a DIB fuentes de la investigación, llegó a esa conclusión luego de descartar la hipótesis de que el comerciante disparara en varias secuencias, mientras perseguía al ladrón que huía de su local.
Esa determinación se hizo en base a las filmaciones de los checo ocurridos en el local de productos lácteos de calle 520 del barrio platense de Tolosa. Pero aún faltan pruebas como la autopsia del cuerpo del ladrón fallecido, que se realizará el lunes.
El hecho ocurrió el viernes cerca de las 13 en el local Don Otto donde dos ladrones armados irrumpieron para asaltar. En el lugar estaban, los dueños, dos empleados y algunos clientes. Cuando los trabajadores alertaron de lo que ocurría a a unos de los dueños, un hombre de 46 años, este les disparó y mató a uno de ellos, de 16 años. El otro logró escapar y es buscado por la policía.
El abogado del comerciante, Marcelo Mazzeo, dijo que su defendido le contó que el joven fallecido intentó abrir fuego contra él pero no lo logró. “Su arma tenía una munición percutada”, confirmó Garganta. “Mi cliente respondió cuando escuchó gatillar el revólver del delincuente”, agregó el letrado.
Como consecuencia, el ladrón cayó muerto en la entrada del negocio. A falta de los resultados de la autopsia, los informes preliminares indicaron que habría recibido cuatro balazos por la espalda.
El fallecido fue identificado como Ariel Rubén Darío González. Tenía 16 años y domicilio registrado en Tolosa, a menos de dos kilómetros de donde tuvo lugar el asalto. Además, contaba con antecedentes por robos de similar modalidad. (DIB)