Desde la Iglesia apuntaron contra “toda forma de autoritarismo” y señalaron que “no hay libertad sin oportunidades para todos”, en vísperas de la Navidad y en un escenario de conflictividad tras el ajuste y el polémico megadecreto del presidente Javier Milei.
En un comunicado, la comisión de Pastoral Social del Episcopado señaló que se viven momentos de “dificultades” y en los que “muchísimos hermanos atraviesan situaciones de crisis”. “Necesitamos una fraternidad que nos una por encima de las diferencias y que éstas no sean usadas para fragmentar, dividir, o enfrentarnos más, sino para encontrar caminos de comunión basados en el amor por el otro”, señaló la Pastoral.
En el escrito, la entidad religiosa sostiene que el aniversario de los 40 años de democracia es “un tiempo propicio para promover la igualdad ciudadana, para renunciar a toda forma de autoritarismo y escucharnos con humildad y esperanza, cuidando la institucionalidad y la gobernabilidad”.
En este marco, sostiene que se requiere de “el mayor esfuerzo para dialogar” y que “la dimensión social debe basarse en el bien común antes que en cualquier interés particular”.
En tanto, en un sugestivo mensaje, la comisión también habló de la libertad (aunque no en términos económicos como suele hacerlo el Presidente). “Necesitamos trabajar la unidad entre los argentinos sin desconocer que -como dijo el Papa Francisco- la verdadera libertad se expresa plenamente en la caridad porque, no hay libertad sin amor y sin oportunidades para todos”, indica el comunicado.
La Pastoral también evaluó que “asistimos a un escenario de fractura social, que pareciera impedir discernir que nadie se salva solo, que la auténtica libertad solo es posible con equidad, integración, con disminución de la profunda desigualdad social que nos atraviesa, con fraternidad que tenga el eje central en la sensibilidad social”.
“Sólo así podremos también construir la paz social, en este momento de nuestra historia. Por eso, la visión cierta de la libertad es aquella de una comunidad que se realiza incluyendo y no descartando”, señala el escrito.
Y finaliza: “Desde el encuentro, y siendo portadores de esperanza, queremos acompañar a los más pobres en esta situación de perplejidad, discerniendo los signos de la venida del Señor hoy, pidiendo una vez más a nuestra Madre, desde Luján, que cuide y acompañe a nuestro pueblo”. (DIB) MT