Los combustibles aumentarán esta medianoche un 4,5, según indicaron el ministerio de Economía y la petrolera estatal YPF, que tomaron esta decisión en medio de un clima de tensión con las compañías del sector privado que `presionaban desde hace unos días con un incremento mayor bajo el argumento que la suba pactada en el marco del programa Precios Justos quedó desfasada por la inflación.
Las refinerías Raízen –a cargo de las operaciones de Shell-, Axion y la compañía Trafigura –que controla Puma Energy- planteaban una suba del 7%, más allá que según el acuerdo alcanzado meses atrás con el gobierno estipulaba un 4,5% para este mes de junio. Fuentes del ministerio de Economía consultadas por DIB fueron tajantes: “El aumento es del 4,5, el ministro cruzó a las petroleras2·, explicaron voceros de esa cartera.
Minutos después, YPF, cuyas decisiones son determinantes para un mercado que controla en un 70% aproximadamente, dijo que “partir de las 00:00 hs del día sábado 17 de junio aumentarán los precios de los combustibles 11 pesos por litro promedio país que representa un 4,5% promedio país”.
La compañía explicó que “Este ajuste contribuye a compensar la variación del tipo de cambio oficial, las diferencias en los costos logísticos y de operación, el achicamiento de la brecha entre grados de combustible y el aumento de precios de biocombustible”.
El hecho de que se haya difundido un porcentaje promedio de suba deja abierta la puerta a un incremento mayor en algunos de los precios puntuales. Pero el dato no fue precisado por la compañía.
Aunque varían regionalmente, tomando como parámetro la estación central del ACA, en CABA, la nafta “súper” en las estaciones de servicio oficiales de YPF está a $ 185. Las otras banderas (Shell, Axion, Puma) suelen aplicar importes superiores. En cuanto a la nafta premium, está a $ 233 en YPF. El gasoil se despacha a $ 198 y el premium a $ 278.
Desde diciembre pasado, las estaciones de servicio aumentaron en promedio cada mes 4% los valores de sus precios, por debajo de la inflación mensual, debido el acuerdo de Precios Justos al que llegaron con las Secretarías de Energía y de Comercio. Esto generó que, en los últimos seis meses, mientras que los precios de los combustibles subieron, en promedio, 30%, la inflación acumulada fue 50%.
Las empresas argumentan que el Palacio de Hacienda no cumplió con ninguna de las promesas que hizo para convencer a la industria de mantener el tope de aumento en 4%, pese a que la inflación mensual fue de 8% promedio en los primeros cinco meses. En primer lugar, el Ministerio de Economía dijo que, si mantenían el acuerdo, las empresas iban a tener prioridad para acceder a divisas al dólar oficial para pagar las importaciones. Sin embargo, sucedió todo lo contrario: el equipo económico le anunció a las empresas que deberán financiar sus importaciones con dólares propios durante 90 días.
La segunda promesa era que se iba a bajar el impuesto a los Combustibles, para reducir la presión fiscal sobre el precio final. “Massa se comprometió a tomar una decisión de reducir el impuesto a los Combustibles a cambio de que genere una mejora del precio relativo para las compañías, pero eso tampoco se cumplió porque el Ministerio de Economía dice que tiene que pasar por el Congreso, pero desde hace tiempo no sesiona”, explicaron una de las empresas.
La tercera promesa era reducir la tasa de devaluación del tipo de cambio oficial, un componente clave para las empresas, ya que gran parte de sus costos están fijados en dólares, como la compra del barril de petróleo. Sin embargo, el Banco Central hizo todo lo contrario y aceleró la tasa arriba del 7% mensual. (DIB)