Verano: en Mar del Plata hay muchas consultas pero pocas reservas

Los empresarios ven con incertidumbre la llegada de la temporada, entre restricciones y protocolos impuestos por la pandemia.

A pocos días del comienzo de la temporada de verano 2020/21, en Mar del Plata continúa la incertidumbre por los cuidados y restricciones impuestos por la pandemia de coronavirus. Así, tanto martilleros como hoteleros de “La Feliz” aseguran que crecen las consultas, pero hay pocas operaciones y reservas concretadas.

En el Colegio de Martilleros reconocen que la cantidad de alquileres concretados hasta esta fecha se encuentra un 50 por ciento por debajo al volumen de trabajo que hubo para la misma época del año. “Se concretaron algunas cosas que tienen que ver con los clientes habituales, los que vienen siempre al mismo departamento, pero las concreciones no están siendo al mismo nivel del último año”, indicó al portal 0223 el presidente de la entidad, Miguel Ángel Donsini.

Los profesionales marcaron dos tendencias: por un lado, los que preguntan para alquilar durante toda la temporada al tener la posibilidad de realizar sus labores por teletrabajo y, por otro, los adultos mayores que deciden postergar su estadía de enero hasta fin de febrero y marzo ante la esperanza que abre el comienzo de la vacunación contra el Covid-19.

Sin definiciones

En la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Mar del Plata también reconocen “muchísimas consultas” a diario pero no ven reflejado un número significativo de reservas. Los propietarios de hoteles acusan la falta de definiciones de la Provincia en cuanto a los protocolos como la principal causa que frena a los turistas a terminar de decidirse por la operación.

En la Cámara de Empresarios de Balnearios y Afines (Cebra) también reconocen el mismo panorama, pero en su caso el protocolo ya fue aprobado tanto por la Provincia como por el Municipio, en donde se plantean restricciones de hasta 6 personas por carpa y 4 por sombrilla, entre otras medidas.

Por otro lado, los campings también reciben un alto número de llamados, pero las reservas se vieron en parte condicionadas por la autorización a contrarreloj que le dio el Gobierno bonaerense a los propietarios de los establecimientos para garantizar la posibilidad de trabajo durante el verano. (DIB)

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