Miramar: en un confuso hecho, matan a un joven de una trompada frente a policías

La Plata, feb 17 (DIB).- Un joven de 17 años murió en
Miramar en un confuso episodio como consecuencia de un fuerte golpe que le
aplicó otro menor de edad frente de efectivos de la Policía bonaerense. El
agresor logró escapar y el hecho es investigado por la Justicia.

La víctima, identificada como Ezequiel Lamas, era oriunda de
González Catán y se encontraba vacacionando en la ciudad costera. El confuso
episodio en el que resultó golpeado se registró el pasado jueves y murió ayer
por la noche en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Mar del
Plata.    

Según versiones extraoficiales, Lamas se encontraba en la
peatonal de Miramar junto a un grupo de amigos circulando en skate cuando
embistió a una transeúnte que llevaba a su hija en brazos, hecho por el cual
discutió con el marido de la mujer a quien el joven le pidió disculpas.

Tras ese incidente, la pareja habría alertado a miembros de
la Guardia Urbana local sobre la supuesta tenencia de un cuchillo por parte de
Lamas. Es por eso que el joven, junto a sus amigos, fue interceptado por
efectivos policiales. Sin embargo, una vez requisados, los agentes comprobaron
que los chicos no tenían ningún cuchillo.

Cuando los efectivos estaban por dejar ir al grupo de
amigos, apareció otro joven y los acuso de un robo. En ese marco, le aplicó una
trompada violenta a Lamas, quien cayó al piso y golpeó su cabeza de manera
contundente.

Con una lesión neurológica grave, el joven fue trasladado al
HIGA donde quedó alojado con fractura de cráneo, un coágulo cerebral severo y
pronóstico reservado, hasta su deceso. En tanto, el agresor escapó del lugar de
los hechos a pesar de la presencia agentes, aunque ya fue identificado por la
Policía.

El tío de Lamas, José Damián Coria, publicó su versión de
los hechos a través de las redes sociales. Allí, asegura que el agresor se
encontraba con la pareja que denunció la tenencia de cuchillo. “La policía no
cuidó a mi sobrino, dejó que le pegaran”, denunció. Y agregó: “Que quede claro
que mi sobrino había ido a pasar sus vacaciones y no era un delincuente”.

Los momentos posteriores a la agresión fueron registrados
por una cámara. Allí, entre la confusión, se ve a Lamas sentado en un banco limpiándose
sangre con un pañuelo, y también tirado en el suelo rodeado de sus amigos y de
policías. (DIB) MT