Una multitud con críticas a Macri en Plaza de Mayo por el 42 aniversario del golpe

La Plata, mar 24 (DIB).- La Plaza de Mayo fue esta tarde el
escenario central del multitudinario acto en conmemoración del golpe de Estado
del 24 de marzo de 1976, que congregó a organizaciones defensoras de derechos
humanos, políticas y sociales, en tanto en todo el país se realizaron actos
similares.

En el escenario montado en la pirámide de Plaza de Mayo,
mirando hacia la avenida de Mayo, se leyeron los documentos de los grupos
convocantes, uno de ellos el de Abuelas de Plaza de Mayo y las Madres de la
Línea Fundadora, Hijos, APDH, CELS y otros organismos de derechos humanos. También
convocó el colectivo de Encuentro Memoria, Verdad y Justicia.

El acto tuvo la particularidad de que concentraron la
atención el ex funcionario kirchnerista Carlos Zannini y el dirigente Luis
D”Elía, quienes recuperaron su libertad esta mañana de la cárcel de Ezeiza, y
marcharon  a Plaza de Mayo desde la sede
de la Ex ESMA, con la columna de Unidad Ciudadana que lidera la ex presidenta
Cristina Kirchner y lo hicieron junto a su hijo Máximo.

También tuvo la particularidad de que se realizó en la Plaza
de Mayo remodelada, obra que no aún concluyó, pero en la cual se habilitó el espacio
entre  el Cabildo y la Pirámide de Mayo,
luego de un acuerdo del gobierno porteño con los organismos de derechos
humanos.

Este Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia,
a 42 años del último golpe de Estado en la Argentina, reunió por primera vez a
todos los organismos defensores de los derechos humanos en torno a una misma consigna:
“la unidad”.

“En este 24 de marzo, el llamado a la unidad resulta
necesario por el reclamo de la libertad de los presos políticos, para denunciar
los retrocesos en las políticas de Estado de Memoria, Verdad y Justicia,  la lentitud en los procesos judiciales y la
pretensión del gobierno del otorgamiento indiscriminado de las domiciliarias a
los genocidas”,

expresaron en un comunicado 13 organizaciones de derechos
humanos.

El discurso tuvo un tono muy crítico contra el Gobierno
Nacional, al que se acusó de difundir “un discurso negacionista”
sobre los delitos de lesa humanidad y los desaparecidos.

También se hizo referencia a la “complicidad”
empresaria con la última dictadura militar y se reclamó la pronta conformación
de una comisión bicameral del Congreso para que investigue este tema.

Por su parte Estela de Carlotto, presidente de Abuelas de
Plaza de Mayo, aseguró durante el tramo del documento que leyó desde el palco,
que la lucha por “la identidad de los niños que nacieron en cautiverio
durante la dictadura seguirá hasta que el último de ellos sepa quién es y de
dónde viene”.

“La lucha por la identidad es la lucha de toda una
sociedad. Hace años que estamos en esta causa y logramos recuperar 127 nietos.
Vamos a seguir por este camino hasta lograr la verdad”, agregó. Y reclamó
que no haya “ni un retroceso en las políticas de memoria, verdad y
justicia, ni un genocida suelto”.

Por último, la integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea
Fundadora, Taty Almeida reiteró ante la multitud que “ningún genocida debe
quedar suelto”.

La Madre se dirigió a la multitud y la hizo entonar a coro
la histórica consigna que acompañó el reclamo por Memoria, Verdad y Justicia:
“30 mil compañeros detenidos desaparecidos/ presentes/ ahora y siempre/…

Al concluir esta alocución se inició la desmovilización de
la primera convocatoria y se dio paso a la entrada de la marcha que organizaron
agrupaciones políticas y partidos de izquierda que integran el Encuentro
Memoria, Verdad y Justicia.

Durante ese otro acto, que se llevó a cabo en el mismo
palco, se leyó otro documento, igualmente crítico con el Poder Ejecutivo pero
que marcó diferencias con el kirchnerismo. (DIB)