La Plata, mar 2 (DIB).- Los productores del trágico recital
del “Indio” Solari en Olavarría declararon ayer ante la Justicia y deslindaron
responsabilidades por el ingreso de más personas que las permitidas en el
predio “La Colmena”, aunque admitieron que se vendieron más tickets que los
previstos.
Así lo expusieron los hermanos Matías y Marcos Peuscovich,
dueños de la productora “En Vivo S.A.”, quienes declararon ayer durante todo el
día en la Fiscalía General de Azul y quedaron imputados por la muerte de dos
asistentes al recital.
Según trascendió, los organizadores admitieron la sobreventa
de entradas, pero alegaron que tenían “permiso” para ello, puesto que se
calculaba que luego muchos compradores no asistirían al evento. La sobreventa
quedó determinado por la Justicia: si bien la autorización oficial era para 155
mil espectadores, las pericias detectaron entre 225 mil y 245 mil personas.
Los productores aseguraron ante la Justicia que su tarea se
limitó a “cuestiones musicales”, y deslindaron la responsabilidad de la
organización. Con su declaración, ahora trasladaron la presión hacia el
intendente Ezequiel Galli, quien había quedado en el ojo de la tormenta cuando
se conoció que el municipio había salido como garante para el alquiler del
predio en el que se desarrolló el recita.
El recital del “Indio” Solari en Olavarría ocurrió el 11 de
marzo de 2017. Allí murieron Javier León, de 42 años, y Juan Francisco Bulacio, de 36, quienes se descompensaron luego de diversas avalanchas humanos que se
produjeron a raíz de la falta de espacio.
El fiscal que sigue la causa imputó a los productores de “estrago
con dolo eventual agravado por haber causado la muerte de dos personas y por
haber puesto en peligro de muerte a otra”. Asimismo, como carátula subsidiaria,
dispuso la figura penal de “estrago culposo agravado por haber causado la
muerte de dos personas y por haber puesto en peligro de muerte a otra, en
concurso ideal con homicidio culposo”. (DIB) JG