Raza, crianza y una ley que no se cumple: los perros peligrosos vuelven al debate

La Plata, jul 12
(DIB).- El nuevo ataque ocurrido en Mar del Plata, donde una joven tuvo que
arrojarse al mar para salvarse de tres perros que ya habían mordido a otra
persona, puso nuevamente de manifiesto una problemática que, con larga lista de
antecedentes, hasta ahora no tiene solución.

En la provincia de
Buenos Aires existe una ley, la 14.107, que estipula sanciones a los dueños y
la obligación de inscribir a las mascotas en un registro bonaerense, pero a
casi una década de su sanción, nunca fue reglamentada. 

En rigor, la
normativa del año 2010 establece cuáles son las razas de perros considerados
“potencialmente peligrosos”, pena con duras sanciones y multas a los
propietarios ante un ataque y los obliga a inscribir a las mascotas en un
Registro de Propietarios de cada municipio, una especie de libreta en la que se
incluiría cualquier incidente protagonizado por las mascotas a lo largo de su
vida y que se cerraría con su muerte.

Asimismo, prevé la
necesidad de identificar al perro con un chip para que el dueño no pueda
desentenderse si la mascota protagoniza un ataque.

Osvaldo Rinaldi, presidente
del Colegio de Veterinarios, que participó de la elaboración del proyecto,
sostuvo que no hay que “estigmatizar a una raza” y que por eso es preferible
hablar de perros “potencialmente” peligrosos en relación a su peso, tamaño y
características físicas.

Según dijo a DIB, la
clave está en el tipo de crianza y en ese sentido sostuvo que “cualquier perro
puede ser peligroso”. “Es importante introducir a la problemática la figura de
tenedor responsable, más allá de la raza del animal”, amplió el veterinario.

Asimismo, consideró
que muchas veces el problema empieza cuando el perro siente que tiene “una
jerarquía dentro de la casa y vive como un humano más”. Eso puede generar
problemas de conducta y dificultades por parte de los dueños para manejarlos.

El rol del
veterinario que trabaja la conducta animal o de los adiestradores no está tan
difundido aún, pero en ciertos casos es necesario ante el “mal manejo” de los
dueños, sostuvo Rinaldi.

 

Tamaño y potencia de mandíbula

En la normativa se estipulan
una serie de condiciones para la tenencia de 14 razas de perros que por su
“naturaleza agresiva, tamaño o potencia de mandíbula, tengan capacidad de
causar la muerte o lesiones graves a las personas y a otros animales”.

Entre estas razas se
incluyen: Akita Inu, American Staffordshire, Bullmastif, Bull Terrier,
Doberman, Dogo Argentino, Dogo de Burdeos, Fila Brasileño, Gran Perro Japones,
Mastin Napolitano, Pitbull Terrier, Presa Canario, Rottweiler y Staffordshire
Bull Terrier.

Rinaldi sostuvo que
el rol del Estado es fundamental y recordó que en el caso de Mar del Plata hubo
reincidencia porque los perros ya habían atacado a otra mujer. En el caso
interviene el Juzgado Correcional Nº 3 de Mar del Plata.

En esa ciudad
bonaerense, donde el año pasado había unas cinco denuncias por semana por la
existencia de perros peligrosos sin correa, existe una ordenanza que regula la
tenencia desde 2015. Señala que los animales deben circular por la vía pública
con una correa no superior a los 2 metros, collar de ahorque y bozal. Y obliga
a los dueños a contratar un seguro de responsabilidad civil para la plena
cobertura de la indemnización por los daños que el perro pudiere provocar. Pero
tampoco se cumple.

 

No lo reconoció y le
mordió la cara

Un hombre de 67 años
fue atacado por un pitbull que le provocó heridas en el rostro y la pierna
derecha también en la localidad bonaerense de Mar del Plata.

El nuevo hecho
ocurrió el miércoles a la tarde, en una vivienda de calle Belgrano al 7800 en
el barrio Dorrego, lugar en el que la víctima suele guardar su auto. Como cada
día, el vecino ingresó al predio, pero lo hizo con otro vehículo, debido a que
lo había cambiado en las últimas horas. 
El perro lo desconoció y lo atacó.

En consecuencia, el hombre
identificado como Ismael Néstor Lizundia, debió ser trasladado al Hospital
Interzonal para recibir las correspondientes curaciones, y se encuentra fuera
de peligro. (DIB) MCH