Exdiputada peronista pidió la expulsión del senador K denunciado por abuso sexual

La Plata, feb 27 (DIB).- Una exdiputada del peronismo
reactivó la polémica por la situación del senador kirchnerista Jorge “El Loco”
Romero, al pedir que el legislador sea apartado del cargo por las denuncias de
abuso sexual que pesan sobre él.

Se trata de Evangelina Ramírez, exdiputada del Movimiento
Evita, y esposa del exintendente de Quilmes Francisco “Barba” Gutiérrez, quien
se posiciona para volver a presentarse como candidato por el peronismo.

La legisladora utilizó su perfil de la red social Twitter
para comentar la noticia sobre la renuncia del senador nacional radical Juan
Carlos Marino a la vicepresidencia de la cámara, a raíz de la denuncia de una
empleada por abuso sexual.

“Esperamos que el Senado bonaerense actúe y accione. ¡Basta
de violencia machista! Basta de enunciados y complicidad”, dijo Ramírez, quien
mencionó en su comentario a Estefanía Calo, la denunciante de Romero, bajo el
hashtag “#yositecreo”.

El senador Romero, uno de los máximos responsables de La
Cámpora en la provincia, fue denunciado en diciembre pasado por abusar
sexualmente de una exmilitante.

Días después de la denuncia, La Cámpora anunció que había
separado al senador de sus responsabilidades, pero el legislador, hasta el
momento, no presentó ni su renuncia ni un pedido de licencia a su banca, hecho
que genera incomodidad entre algunos compañeros de bloque, que ven que su
presencia podría complicar el rol opositor del espacio.

Por lo pronto, según pudo saber DIB, Romero continuará
ocupando su banca luego de que el próximo viernes la gobernadora María Eugenia
Vidal abra el período de sesiones ordinarias ante la Asamblea Legislativa.

 

La denuncia

Estefanía Calo, la joven denunciante, publicó en diciembre un
posteo en su cuenta de Facebook, en el que señaló que el hecho ocurrió en enero
de 2017, luego de una salida que había compartido con amigas y algunos jóvenes
de La Cámpora, identificados bajo la conducción de “Misio” Caserez.

Indicó que al salir del boliche fue con algunas de sus
amigas a la casa de este referente, y que allí “consentí tener relaciones
con uno de ellos”. Sin embargo, denunció que tras ello, y mientras
esperaba a otra amiga, el senador Romero “me empieza a decir que yo le
tenía que practicar sexo oral a los tres, me encerró en la cocina con cada uno
tomándole el tiempo como si yo fuera una trabajadora sexual que los estaba
atendiendo”.

La mujer resaltó que “ninguno de los pibes que quedaban
encerrados conmigo se propasaron, me respetaron el no”. “Cuando por
fin logro salir de esa cocina el “Loco” Romero me agarra y me
encierra en el baño con él, impidiéndome salir. Se baja los pantalones, saca su
miembro y me empieza a pedir que le practique sexo oral. Lo cual me negué
reiteradas veces y le suplicaba que me dejara salir”.

Tras viralizarse el posteo, varias mujeres relataron
situaciones similares con Romero y otros dirigentes de la agrupación. Y
remarcaron que en ningún caso fueron contenidas ni escuchadas por la
agrupación.

Por su parte, Romero publicó un descargo en sus redes
sociales, en las que no negó el hecho, pero se excusó al señalar que “soy
un varón criado en una sociedad patriarcal”.

“Deconstruirnos significa mejorarnos a nosotros mismos en
todos los sentidos y eso es lo que debemos hacer si queremos mejorar también la
organización donde militamos y, en definitiva, construir una sociedad más
justa, libre y soberana”, señaló.

Desde La Cámpora, en tanto, aseguraron que tras el hecho se
le quitaron a Romero todas sus responsabilidades partidarias. “Se le quitaron
todas las responsabilidades políticas dentro de la organización”, por lo que
“no puede participar en los espacios de militancia” mientras dure la aplicación
del protocolo que se estableció para investigar casos de abusos. Sin embargo, a
casi tres meses del hecho no hubo novedades. (DIB) JG