Ahora Carrió pidió que citen a declarar a Gisela Berger en causa contra Scioli

La Plata, feb 1 (DIB).- La diputada Elisa Carrió pidió hoy a
la justicia que llame a declarar a Gisela Berger, la expareja del exgobernador
bonaerense Daniel Scioli, por sus declaraciones en las que sembró sospechas
sobre la fortuna del actual diputado, denunció amenazas de su entorno y hasta
habló de violencia verbal.

Carrió, que había adelantado que planeaba accionar contra
Carrió, realizó su presentación hoy, el mismo día en que finalizó la feria
judicial, en la que reclamó que se cite a declaración testimonial a Gisela
Berger.

La intención de la diputada es que la modelo y madre de
Francesa -la hija de un año que tuvo junto al Scioli- revele todo lo que sabe y
todo lo que vio en el marco de la causa de lavado y administración fraudulenta
que instruye el fiscal platense Álvaro Garganta y que se inició tras una
denuncia de Carrió.

El escrito fue presentado por Mónica Frade, una de las
espadas jurídicas de la Coalición Cívica en la Provincia de Buenos Aires, luego
de que Carrió diera al aval para avanzar contra el ex gobernador. En el entorno
de la diputada cuentan que ya hubo contactos “informales” con la ex pareja de
Scioli.

En la presentación ante la UFI 11 se destaca como
antecedente el tuit en la que Berger acusa de mentiroso y declaraciones
posteriores en las que la modelo denuncia amenazas de Scioli y su entorno.
“No puedo contar qué tipo de amenazas. Yo he sufrido un montó con él. No
quiero pasarla más mal. Hasta acá llegué”, había dicho Berger entonces.

Berger ya había aparecido mencionada en la causa por lavado
en una de las ramificaciones del expediente que investiga los vuelos que el ex
gobernador realizaba durante la campaña electoral para las elecciones de 2015,
cuando era candidato a presidente por el kirchnerismo. Esos viajes
proselitistas se habrían pagado con fondos del Estado, lo que constituye un
delito.

En julio de 2015, Scioli voló a Cuba con Berger en medio de
la campaña electoral. El ex gobernador viajó a la isla para conseguir una foto
en tono proselitista con el ahora fallecido Fidel Castro. Scioli subió a la
modelo al avión a pesar de que en ese entonces estaba en pareja con Karina
Rabolini.

Según un informe de Migraciones que figura en el expediente,
la hacían pasar como parte de la tripulación -que incluye al piloto y los
comisarios de abordo- para no despertar sospechas. En la causa está acreditado
que ese vuelo costó $ 1.460.065 y lo pagó la provincia de Buenos Aires.

Carrió también busca que Berger aporte datos sobre esos
vuelos. Aunque lo que más le interesa a la diputada es la información que pueda
brindar sobre los bienes y la fortuna de Scioli. A principios de enero, la
modelo publicó un duro mensaje en las redes sociales contra el diputado en el
que sembró sospechas sobre el origen de su fortuna.

Una parte de la causa de lavado contra Scioli va camino al
juicio oral. En octubre pasado, el fiscal Garganta le pidió a la juez Marcela
Garmendia que lo mande a juicio por haber recibido dádivas de Ricardo Miller,
empresario y amigo de Scioli.

El fiscal lo acusa de haber adjudicado de manera irregular
nueve obras públicas por $ 117 millones al empresario Miller que luego le
compró un terreno en Villa La ??ata, donde vive Scioli, por US$ 3.850.000. Cree
que ese dinero sería una devolución por los negocios que le dio. Además, el
empresario le prestaba helicópteros para que se moviera cuando era
gobernador. 

Berger está instalada actualmente en Córdoba junto a su hija
y su familia tras el distanciamiento de Scioli. En sus declaraciones mediáticas
había dicho que estaba dispuesta a declarar si la Justicia la llamaba. Ahora tendrá
la oportunidad de contar todo lo que sabe. (DIB)