La Plata, nov 16 (DIB).- Un jurado popular de La Matanza
declaró “culpables” por unanimidad a dos jóvenes que fueron juzgados
por el crimen de Maximiliano Taranto, un profesor de inglés y estudiante de
Historia que el año pasado fue asesinado cuando intentaron robarle la moto en
la localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere.
Fuentes judiciales informaron hoy que luego de una
audiencia que se extendió durante toda la jornada de ayer y culminó a las 2 de
hoy, los ciudadanos integrantes del jurado popular hallaron pruebas suficientes
para encontrar a Franco Estrella (25) y Lucas Jimenez (23) responsables de
“homicidio criminis causae”, matar para ocultar otro delito y lograr
la impunidad.
El debate coordinado por el juez Franco Fiumara comenzó ayer
por la mañana en un salón de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM),
donde el jurado pudo apreciar prueba documental que se exhibió en una pantalla
y escuchó la declaración de los testigos.
Luego, formularon los alegatos el fiscal de juicio Alberto
Luppino, quien pidió que ambos imputados fueran declarados
“culpables” y el defensor oficial Marcelo Sansone, que reclamó la
absolución o una pena por homicidio simple.
Posteriormente, los doce ciudadanos pasaron a deliberar
durante alrededor de 40 minutos acerca de las opciones que les había dado el
juez, si se trataba de un homicidio simple (8 a 25 años), en ocasión de robo
(10 a 25 años) o criminis causae (que prevé perpetua).
Alrededor de las 2, el jurado se inclinó por la última
opción sumada a una tentativa de robo agravada por uso de arma de fuego.
De esta forma, el martes próximo, cuando se realice la
audiencia de cesura estipulada para este tipo de juicios, el fiscal estará en
condiciones de pedir una condena a perpetua, indicó un vocero judicial.
La familia Taranto se mostró “conforme” con el
resultados del juicio, destacó que el veredicto haya sido por
“unanimidad” y ahora aguarda la imposición de la pena, según
publicaron en la página de Facebook “Justicia por Maxi Taranto”.
El crimen fue cometido el 2 de mayo del año pasado alrededor
de las 22.30 en la puerta de una vivienda situada en Encina al 2400, entre
Piedra Buena y Zapata, donde la víctima residía junto a su familia.
Taranto acababa de llegar de la facultad, donde cursaba la
Licenciatura en Historia, cuando fue sorprendido por dos jóvenes que iban
armados y se movilizaban en una moto tipo Scooter.
En esas circunstancias, el profesor forcejeó con uno de los
“motochorros” para evitar el robo y recibió un disparo en el rostro
que le produjo la muerte. (DIB)