La Plata, sep 22 (DIB).- Lejos quedó el 15% de incremento
salarial que la mayoría de los intendentes habían acordado con sus trabajadores
a principios de este año, en consonancia con las proyecciones inflacionarias de
aquel entonces. Ahora, tras el drástico cambio en el escenario económico, los
municipales exigen el reinicio de las negociaciones para acercar sus sueldos a
una inflación, que ya alcanzó el 24% y que superará el 40%.
De esta manera, el conflicto salarial vuelve al centro de la
escena en las comunas bonaerenses, y aunque los intendentes intentan tomar
medidas para aplacar el creciente descontento con bonos y adelantos, no alcanza
para frenar el reclamo.
Desde la Federación de Sindicatos de Trabajadores
Municipales bonaerense (FSTMPBA) advirtieron que el salario de los trabajadores
municipales ha quedado, en la mayoría de los distritos, “muy por debajo de la línea
de la pobreza”.
En ese sentido, en las últimas horas desde ese gremio
enviaron una nota a la gobernadora María Eugenia Vidal, a cada intendente
bonaerense y a los presidentes de los Concejos Deliberantes para solicitar la
reapertura de paritarias en todos los distritos de la provincia.
En tanto, desde la Federación de Sindicatos Municipales
Bonaerenses (Fesimubo), dijeron a DIB que “la directiva es que los sindicatos
pidan la reapertura de paritarias en cada municipio”. E indicaron que “dependiendo
de esos resultados veremos si realizamos una medida a nivel provincial”.
Así lo señaló el secretario adjunto de ese gremio, Hernán
Doval, quien consideró que “hay básicos salariales que están por debajo de la
indigencia”, aunque reconoció que cada municipio tiene sus particularidades y
que “hay otros que están mejor”.
En tanto, el reclamo se replica por estas horas en Morón,
Necochea, Chascomús, Chivilcoy, Chacabuco, Luján y Berisso. Asimismo, en
algunos casos, los gremios se quejan de que los salarios habían quedado
desfasados incluso el año pasado, cuando muchos municipios cerraron acuerdos en
torno al 20% con una inflación de 24,8%.
En Morón, por ejemplo, el Sindicato de Empleados y
Trabajadores Municipales local también envió una carta al intendente Ramiro
Tagliaferro. “La situación del trabajador municipal de Morón no da para más.
Gana un promedio de $ 10 mil pesos, cuando para no ser pobre necesitás ganar
alrededor de $ 19 mil. La verdad es que la estamos pasando muy mal, somos unos
de los sueldos más bajos de la provincia de Buenos Aires”, sostuvo el
secretario general de ese gremio, Luis Duré.
En tanto, luego de un extenso conflicto, el más largo en la
provincia, el Sindicato de Trabajadores Municipales de Olavarría firmó el
acuerdo con el intendente Ezequiel Galli de un 29,83% de aumento (que rige
hasta diciembre) con cláusula de revisión en enero y abril. Se sumará un 10 %
en noviembre (a cobrar en diciembre), sobre el 18% otorgado por decreto a
mediados de agosto.
Mientras que en Avellaneda, el intendente Jorge Ferraresi
anunció un aumento del 35%. No obstante, desde el Sindicato de Trabajadores
Municipales local se quejaron que se da “sobre un básico de $ 6.000” y que fue
otorgado por decreto, por lo que realizarán una medida de fuerza.
Quejas por la ley
El Secretario General de la Federación de Sindicatos de
Trabajadores Municipales de la Provincia de Buenos Aires, Oscar Ruggiero, se
quejó del panorama salarial dispar en cada municipio y lo atribuyó a la “ineptitud”
de la Ley Provincial N° 14.656 “que no contempla en el territorio de la
provincia una paritaria vinculante, y deja a merced de cada jefe comunal y los
Concejos Deliberantes la posibilidad de actualizar el salario de los
trabajadores”.
“La ley presentada con bombos y platillos por sus autores,
demuestra hoy algo que nuestra histórica Federación ya había advertido, y es
que al no ser vinculante sólo puede sentarse a discutir el intendente que
quiera hacer”, agregó. (DIB) MCH