La Plata, mar 22 (DIB).- El
Senado bonaerense frenó esta tarde la prórroga a dos emergencias pedida por la
gobernadora María Eugenia Vidal, luego de un planteo de la oposición contra el
tratamiento “exprés” de las normas.
La cámara de Diputados
bonaerense aprobó la extensión de las emergencias administrativas y de
infraestructura enviadas por el Ejecutivo, pero las iniciativas no lograron
pasar el filtro del Senado, donde pese a que Cambiemos contaba con los números fueron
pasadas a comisiones, en medio de críticas de la oposición.
Los proyectos aprobados
prorrogan por un año una serie de medidas para agilizar los trámites del Estado
en materia administrativa y de obra pública, y para ello, entre otras cosas,
limitan la supervisión de los organismos de control.
Las medidas generaron una
dura reacción de la oposición, que cuestionó la prolongación de un “estado de
excepción” para la contratación de bienes y servicios en el Estado. También hizo
foco en que la emergencia administrativa permite que el Ejecutivo pague
contratos más altos a los asesores de la Gobernadora y los ministros.
Pero el grueso de las
críticas estuvo centrado en el tratamiento de las normas, que habían sido
ingresadas días atrás y no contaban con su correspondiente tratamiento en
comisiones.
El mismo debate se había
dado ayer frente a la intención de Cambiemos de tratar dos proyectos de la reforma judicial por la misma vía. El oficialismo debió girar las iniciativas a
comisiones luego de que el massismo y el peronismo “dialoguista” rechazaran
darle los votos en Diputados para su tratamiento sobre tablas.
En el caso de las
emergencias, fue el Senado el que frenó las intenciones del Ejecutivo: la
cámara que conduce el vicegobernador Daniel Salvador recibió los proyectos
aprobados en Diputados y los giró a comisiones. Aunque en el oficialismo
aseguraban contar con los números para avanzar, pesaron las quejas previas del
kirchnerismo, que había amagado con exponer a quienes desde la oposición le
prestaran los dos votos que necesitaban para acceder a los dos tercios.
El “apuro”, incluso,
generó ciertos enojos en el propio oficialismo: algunos senadores se quejaron
porque el Ejecutivo envió los proyectos muy cerca de la fecha de tratamiento,
lo que no les dio margen para la negociación.
“Nosotros nos
comprometimos a sacar los proyectos que se necesitaran en 15 o 20 días, pero
que hay cuestiones que necesitamos analizarlas desde antes. Lo que pasó con la
reforma judicial es un claro ejemplo de que cuando no se respeta ese
procedimiento siempre cuesta más”, dijo a DIB bajo reserva un senador del
oficialismo. (DIB) JG