Detuvieron a la esposa del acusado de degollar a su tía como coautora del crimen

La Plata, mar 8 (DIB).- La esposa del hombre aprehendido por
el crimen de su tía de 80 años, que fue hallada degollada y apuñalada en la
ciudad bonaerense de Coronel Pringles, fue detenida hoy como partícipe del
hecho, informaron fuentes policiales.

Se trata de Marcela Alejanda Suárez (47), esposa de Andrés
Oscar Pontaut (50), quien está preso desde ayer en el marco de la causa por la
que se investiga el crimen de su tía María Pontaut (80) cometido en una
vivienda de la calle Dorrego al 1300.

Un vocero de la investigación precisó que “Suárez se
encontraba demorada en una seccional policial por una causa por estupefacientes
poco después de haber sido detenido su esposo”.

“Tras distintos elementos de prueba, entre ellos el
testimonio de un amigo de la mujer, a quien por mensajes de WhatsApp le contó
lo que le había hecho con su esposo a la octogenaria, el fiscal Jorge Viego
solicitó a la Justicia de Garantías a cargo de Gilda Sthempelet la detención de
Suárez”, agregó.

La magistrada ordenó la detención de la mujer bajo las sospechas
de que sea “autora prima facie de homicidio calificado por ser cometido
con alevosía, ensañamiento, codicia y criminis causa”.

Según la investigación, la mujer fue asesinada en horas del
mediodía del martes, poco después de haber ido en compañía del hijo de Andrés
Pontaut a la sucursal del Banco Provincia donde depositó unos 100.000 pesos
producto de transacciones agropecuarias.

Horas después, el joven volvió a la vivienda de su tía
abuela, quien era viuda, vivía sola y no tenía hijos, pero como no le
contestaba el timbre saltó un paredón y levantó la cortina de una de las
ventanas, por donde observó que se encontraba el cadáver de la mujer.

Fuentes policiales aseguraron que el joven observó a través
de la ventana a su familiar con un corte en el cuello y en el tórax, sentada en
una silla de ruedas, por lo que de inmediato alertó a personal policial.

“La mujer estaba sentada en una silla de ruedas, con el
almuerzo preparado. Se determinó que había regresado pasada las doce de la
entidad bancaria por lo que el hecho habría sido cometido entre las doce y
media y las trece treinta”, precisó un investigador.

Según determinaron los peritos de Policía Científica y el
médico de Policía la mujer presentaba un corte en el cuello como así también
una herida en el tórax que le había perforado la arteria pulmonar.

Las fuentes consultadas comentaron que una de las
principales hipótesis que baraja el fiscal Viego es que la mujer y su esposo
fueron a la vivienda de la octogenaria con el fin de apoderase de dinero en efectivo
por una futura herencia.

En la vivienda, además, los investigadores comprobaron que
no se encontraba el arma homicida y que la mujer contaba con una caja de
seguridad en cuyo interior se encontraban unos 90.000 pesos y estaba cerrada.

Tras las primeras averiguaciones, los investigadores
determinaron que el crimen había sido cometido por el padre del joven, sobrino
de la víctima, quien le confesó a los policías haberla matado: “Me tenía
podrido esta vieja”.

Tras un allanamiento llevado a cabo en la casa de Pontaut
los policías secuestraron un cuchillo con mango de oro y plata de 16
centímetros de hoja que había sido robado de la casa de la víctima y, se cree,
fue con el que se cometió el asesinato de la anciana.

Además, los pesquisas secuestraron un revólver calibre .38
con seis proyectiles intactos, una agenda y las llaves de la casa de la víctima
y dos teléfonos celulares, uno de los cuales pertenecía a la anciana.

Los policías hallaron también en el fondo de la vivienda las
cenizas de prendas de vestir, que, se cree, es la ropa que llevaba puesta el
hombre al momento de cometer el homicidio y que la prendió fuego para borrar
rastros.

Poco después y con el correr de las horas los investigadores
recabaron diversos testimonios ente ellos el de un amigo de Suárez, a quien la
mujer le había confesado que “desde hace varios años quería matar” a
la anciana.

Según el testigo, Suárez junto a su esposo días atrás le
había comentado que “quería asesinar a la mujer, que era capaz de hacerlo
y que ente los motivos era por la herencia que iba a recibir la pareja”.

También los investigadores tuvieron en cuenta capturas de
whatsApp realizadas entre la mujer y el testigo en el que la misma le comentó
el pasado 6 de marzo, día en que fue hallada asesinada la octogenaria que
“hice lo que te dije, no digas nada”.

“El testigo dijo que la propia Suárez en los mensajes
telefónicos le contó que ella le había clavado el cuchillo en el corazón a la
octogenaria y que luego su marido procedió a degollarla”, agregó el
investigador.

También y según declaró el testigo la mujer le afirmó que
“buscaban una caja fuerte, que habían revuelto todo y que no estaba
arrepentida”.

La víctima era jubilada pero tenía campos, era de una
familia conocida en la localidad y tradicional de productores ganaderos.

Se cree que el dinero que la mujer había depositado junto
con el muchacho era producto de la venta de hacienda.

Según se indicó tanto Pontaut como su esposa fueron
imputados por los delitos de “homicidio calificado por ser cometido con
alevosía, ensañamiento, codicia y criminis causa”. (DIB)