La Plata, ene 24 (DIB).- Dos
jóvenes fueron asesinados a cuchillazos en el marco de una pelea en la puerta
de una casa de la localidad platense de City Bell, donde se realizaba una
fiesta privada que había sido convocada por las redes sociales. Por el hecho
fueron detenidos una mujer embarazada y un hombre.
Los homicidios, que se
conocieron hoy, ocurrieron el sábado pasado en una vivienda ubicada en calle 7,
entre 475 y 476. Según le detalló el fiscal del caso Marcelo Romero a la
agencia de noticias estatal Télam allí se dio “una gresca generalizada, en la
que volaron botellas y otros objetos contundentes” y “se produjeron dos
homicidios independientes uno de otro”.
“Se trataba de una fiesta
que había sido convocada por las redes sociales por lo que apareció gente que
no era conocida por los organizadores. Estos jóvenes no eran bienvenidos y
comenzaron a pelearse con quienes participaban de la fiesta”, explicó Romero.
Según los investigadores,
en el medio de la riña, la dueña de la casa y organizadora de la
celebración, Laura Sosa, de 21 años y
embarazada de dos meses, habría salido de la vivienda y asesinado de una
puñalada a Rubén Octavo (21), quien falleció en el acto.
En tanto, minutos
después, Nicolás Basualdo (28), quien tendría un parentesco con Sosa, habría
atacado a puñaladas a Maximiliano Mengarelli (24), quien muró en el Hospital
San Roque de Gonnet por las heridas.
Por el hecho, Romero
ordenó allanamientos en el domicilio donde se hizo la fiesta, donde fue
detenida Sosa (alojada en la Comisaría de la Mujer) y se secuestraron elementos
para la investigación como cuchillos de hoja lisa y prendas con manchas
hemáticas. Asimismo, se llevó adelante un procedimiento en la casas de
Basualdo, imputado por el homicidio de Mengarelli, quien negó haber participado
de la pelea.
Al ser indagado ayer,
Basualdo negó haber participado de la pelea que terminó con el asesinato de
Mengarell, mientras que Sosa se negó a declarar el domingo, tras lo que Romero
dispuso que quede alojada en la Comisaría de la Mujer, ya que está embarazada de
dos meses y es madre de un niño lactante. El caso fue caratulado como
“homicidio calificado por alevosía”. (DIB) MT