Aunque no son muchos en proporción con otros medios de transporte, cada vez que un avión sufre un accidente deja una huella imborrable en la memoria. Un repaso por los peores accidentes de la aviación de nuestro país.
9 de diciembre de 1957: un Douglas DC-4 de Aerolíneas Argentinas cayó en las cercanías de la ciudad bonaerense de Bolívar cuando se dirigía a San Carlos de Bariloche. Fueron 61 los muertos.
Esa tarde, 55 pasajeros y seis tripulantes perdieron la vida cuando un avión Douglas DC-4 de Aerolíneas Argentinas que cubría el trayecto entre Buenos Aires y San Carlos de Bariloche se precipitó a tierra en la estancia Las Mercedes, a 21 kilómetros del casco de Bolívar. Los restos de víctimas, muchas de ellas parejas de recién casados que viajaban al sur del país para pasar unos románticos días de luna de miel, quedaron esparcidos sobre el terreno llano y húmedo, junto a las partes de la aeronave que había sido adquirida por la compañía a principios de ese año.
La aeronave, al mando de un piloto de apellido Peloso, de 45 años y con más de 10 mil horas de vuelo de experiencia, no puso esquivar una fuerte tormenta. Los 61 cuerpos se hallaron en el lugar junto a los restos de la aeronave, menos dos de ellos que fueron ubicados a unos 250 metros antes del impacto y en la misma trayectoria que llevaba el avión.
19 de julio de 1961: un Douglas DC-6 que viajaba hacia Comodoro Rivadavia estalló en el aire en medio de una fuerte tormenta. Hubo 67 muertos.
Un avión de Aerolíneas Argentinas perdió un ala al intentar cruzar una tormenta en la localidad bonaerense de Azul y cayó a tierra, tras lo cual fallecieron 67 personas entre pasajeros y tripulantes. Las tareas de rescate en el campo “La María Eugenia” fueron desesperantes, bajo la incesante lluvia y un viento huracanado. El horror del avión tragado por la tormenta no se disipó durante mucho tiempo.
Según las conclusiones a las que llegaron más tarde los peritos, el avión comenzó a sacudirse y recibir abundante lluvia y descargas eléctricas. El avión intentó cambiar de altitud para evitar la tormenta y hay registros periodísticos que indican que desde la cabina intentaron comunicarse con Azul pero la actividad eléctrica lo impidió.
A las 8 de la mañana el DC-6 fue golpeado por una tremenda corriente de aire ascendente que impactó sobre su ala derecha y prácticamente la arrancó. Los fragmentos chocaron contra la cola del avión, que quedó destrozada. Ya sin control, el avión cayó en picada sobre el campo “La María Eugenia”, entre las estaciones de Pardo y Miramonte, en el partido de Azul.
Los cuerpos de los 67 desgraciados ocupantes del vuelo AR644 se hallaron dentro de un diámetro de unos 300 metros del punto de impacto, mientras que fragmentos del avión llegaron a aparecer hasta a tres kilómetros de distancia.
El 10 de octubre de 1997: un avión de Austral cayó en picada en Nuevo Berlín, Uruguay. Murieron 74 personas.
En la noche de esa jornada, el vuelo 2553 de Austral despegó pasadas las 21 de Posadas con destino a Aeroparque. Una hora después, cuando sobrevolaba la localidad entrerriana de Gualeguaychú, perdió contacto con los radares.
El avión cayó a 1000 kilómetros por hora. El fuselaje y los cuerpos se desperdigaron en un radio de 800 metros, sobre el fango de Nuevo Berlín, en medio de la nada, a 32 kilómetros de Fray Bentos, Uruguay.
En el avión con matrícula argentina LV-WEG viajaban 69 pasajeros y 5 tripulantes. En el accidente murieron todos. Las 35 personas entre directivos de Austral, funcionarios civiles y de la Fuerza Aérea fueron absueltos en un juicio en 2021.
21 de noviembre de 1977. Un vuelo de Austral Líneas Aéreas en Bariloche dejó el saldo de 46 víctimas fatales.
El accidente se produjo por choque de la aeronave contra el terreno durante la aproximación final a la pista de Bariloche, al haber descendido errónea y anticipadamente por debajo de límites de seguridad.
La causa del accidente puede atribuirse a un error de procedimiento de la tripulación y también, probablemente, por el estado anímico del comandante.
8 de noviembre de 1995: un Fokker de la Fuerza Aérea se precipitó a tierra a 20 km de la ciudad de Villa Dolores, Córdoba. Hubo 52 muertos.
Ese día, un Fokker F 27 TC-72 de la Fuerza Aérea despegó del aeropuerto General Mosconi de Comodoro Rivadavia con destino la Escuela de Aviación Militar de Córdoba. Los suboficiales que viajaban junto a sus familias celebrarían sus 25 años de egresados.
Sin embargo, el vuelo terminó en uno de los hechos más trágicos de la historia de la aviación nacional. El avión se estrelló contra una ladera en las sierras de Córdoba y todos los ocupantes fallecieron en el acto.
Más de 150 socorristas trabajaron en el accidente y demoraron más de 8 horas para llegar al lugar. Los restos del avión fueron encontrados a 2.400 metros de altura. (DIB) FD