Dos jóvenes fueron detenidos en las últimas horas en las localidades bonaerenses de Bernal y Ezeiza, como sospechosos de haber matado a Carlos Sánchez Paredes, el estudiante de 22 años asesinado el sábado pasado en Quilmes, cuando se dirigía a tomar un colectivo rumbo a La Plata.
Uno de los presuntos delincuentes tiene 24 años, mientras que el otro tiene 17, pero es imputable. El detenido menor de edad será remitido a la UFI de Menores N°2 de Quilmes. La indagatoria del mayor, a cargo de la UFI N°4 de la fiscal Karina Gallo, se esperaba para las próximas horas.
La causa fue calificada como “homicidio en ocasión de robo”, debido a que los investigadores no hallaron el celular ni la mochila del estudiante de la Facultad de Informática de la Universidad Nacional de La Plata, institución a la que se dirigía cuando fue sorprendido por los delincuentes.
En tanto, de acuerdo a los primeros análisis realizados al cadáver, solo presentaba un golpe en la cabeza, y aún no se pudo determinar si fue una sola persona la que lo atacó.
El violento episodio ocurrió cerca de las 6 de la mañana del sábado, en la esquina de Montevideo y Falucho, en Bernal Oeste. Sánchez Paredes caminaba hacia la calle Dardo Rocha para tomar el colectivo para ir a la facultad cuando fue sorprendido por delincuentes.
El joven tenía la costumbre de avisar a su madre por teléfono cada vez que subía al colectivo para dejarla tranquila, pero ese día el llamado no llegó. Luego intentar comunicarse con él, la mujer salió a buscarlo y lo encontró aún con vida tendido en la vereda, agonizando. Un vecino la asistió y los llevó a Wilde para que pudiera recibir atención médica, pero Carlos murió minutos después de llegar a la guardia del hospital.