Sam Altman, director ejecutivo y cofundador de OpenAI, confirmó que su empresa no desarrollará “por algún tiempo” GPT-5, el presunto sucesor de su chatbot con inteligencia artificial (IA) GPT-4, después de que un grupo de empresarios del sector tecnológico -entre ellos Elon Musk- solicitaron en una carta de tono apocalíptico que se suspendan durante seis meses los sistemas de IA “más poderosos que GPT-4”.
Altman dijo que a la carta “le faltaban la mayoría de los matices técnicos sobre dónde necesitamos la pausa”, durante una conferencia celebrada en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), a la que asistió por videoconferencia.
Asimismo, aseguró que su compañía no está trabajando en el desarrollo de un GPT-5 por lo que la misiva -que ya ha sido firmada por más de 25.000 personas- le pareció un poco “ridícula”.
Aunque coincidió con la idea de que OpenAI tiene que “moverse con precaución”, ya que hay “un rigor cada vez mayor en cuestiones de seguridad” y eso es “realmente importante”.
“También estoy de acuerdo en que, a medida que las capacidades se vuelven más y más serias, el listón de seguridad debe aumentar”, dijo Altman en el evento de la institución.
OpenAI creó ChatGPT y luego GPT-4, un chatbot de IA que puede generar respuestas similares a las de un humano en cuestión de segundos, y Microsoft utiliza su tecnología en su chatbot Bing. No obstante, el hecho de que OpenAI no esté trabajando en GPT-5 no significa que no esté expandiendo las capacidades de GPT-4. (DIB)