Comprueban que personas vacunadas sufren menos depresión

El estudio fue llevado a cabo por investigadores del ITBA junto con alumnos y graduados de la carrera de Bioingeniería.

Una investigación realizada por alumnos, graduados, docentes e investigadores del Instituto Tecnológico Buenos Aires (ITBA) se centró en el impacto que produce en la salud mental de los argentinos la inoculación contra el coronaviris.

A partir del análisis de los niveles de depresión y desorden de ansiedad generalizada (GAD) durante dos momentos diferentes a lo largo de la pandemia, se evidenció que las personas vacunadas sufren menos depresión que las personas no inmunizadas. 

La investigación, publicada en la Revista Frontiers in Psychiatry, se enmarca en la preocupación e incertidumbre sufridas por las personas desde la irrupción de la pandemia, con un impacto directo en la salud mental.

De esta forma, buscó revelar el GAD y la depresión en diferentes olas pandémicas en Argentina, así como los factores que pueden contribuir a reducir la magnitud de estos trastornos, incluida la vacunación.

El proyecto fue llevado a cabo por el graduado en Bioingeniería Pedro Benedetti -autor principal-, los alumnos de la misma carrera Franco Moscato, Victoria Reppucci, y un equipo de investigadores del departamento de Ciencias de la Vida del ITBA: Diego Moncada, Alejo Barbuzza, Franco Moscato, Victoria Reppucci, Celina Goyeneche, Cynthia Katche, Jorge H. Medina, Haydee Viola y Fabricio Ballarini.

A través de dos encuestas realizadas a lo largo del período pandémico, la primera (noviembre de 2020) y en la segunda oleada (mayo de 2021), la investigación se basó en consultar a los participantes sobre su estado de vacunación y de ánimo autopercibido en adultos entre 18 y 50 años.

“Nuestro objetivo fue analizar el impacto de las vacunas, la actividad física y la modalidad de trabajo, bajo la hipótesis de que pueden actuar como posibles factores protectores de la salud mental de la población después de un período tan prolongado de pandemia”, indicaron los investigadores.

El estudio determinó que la interacción entre los estados emocionales y el efecto de la inoculación es compleja. Se informó que el GAD y la depresión pueden aumentar asociados con las dudas por parte de la población hacia las vacunas.

En esa línea, desde el ITBA destacaron que en la Argentina la primera ola de Covid-19 se presentó cuando aún no existían vacunas aprobadas para el tratamiento (noviembre de 2020), pero la segunda ola (mayo de 2021) sorprendió al país en medio de la campaña de vacunación masiva.  (DIB)

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí