Los investigadores que llevan adelante la pesquisa del atentado a Cristina Fernández de Kirchner, perpetrado el 1º de septiembre, siguen la pista de una tercera arma de fuego que podría pertenecer a Brenda Uliarte, procesada con prisión preventiva como coautora del hecho, junto a Fernando Sabag Montiel.
Esta tercera pistola se suma a las otras dos armas que tenía el grupo que participó en el atentado: la Bersa utilizada por Sabag Montiel y otra cuyo titular es Gabriel Carrizo, uno de los integrantes de la “Banda de los Copitos”, también detenido y procesado.
La jueza María Eugenia Capuchetti y su equipo de investigación buscan determinar, a partir de las imágenes que Uliarte envió en sus conversaciones de WhatsApp, si el arma que tenía es otra diferente a las ya identificadas.
De acuerdo a lo observado por los peritos en las fotos, el arma señalada como la “tercera” en cuestión, es una pistola que puede costar hasta u$s3.000, es decir, un valor muy por encima del poder adquisitivo de los imputados. Aquí entra en juego la línea de investigación sobre si había alguien detrás del grupo, financiándolos y con conocimiento de armas y municiones.
El pasado 1º de septiembre Sabag Montiel se infiltró entre los militantes que esperaban a Cristina Fernández en inmediaciones de Juncal y Uruguay, en el barrio porteño de Recoleta, y le gatillo a pocos centímetros del rostro. Utilizó la pistola Bersa calibre .32, y al no accionar la corredera, los disparos no salieron. (DIB) ACR
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