El ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa, le agradeció hoy Cristina Fernández de Kirchner por “empujarnos a ser mejores y a no conformarnos nunca”, luego de que la vicepresidenta lo mencionara con halagos en su discurso en Chaco.
En su conferencia magistral del pasado viernes, al recibir título de Doctora Honoris Causa de la Universidad Nacional del Chaco Austral (Uncaus), CFK se refirió con halagos al gobernador Axel Kicillof y al ministro Costa, quien ocupó entre 2013 y 2015 el cargo de Secretario de Comercio Interior y fue uno de los impulsores del programa Precios Cuidados.
“Uno tiene que saber debatir y saber los intereses que tiene enfrente, y no hay que enojarse”, dijo la vicepresidente, para luego contar que una hija de Costa se llama Amanda por la marca de yerba mate, luego de las discusiones intensas que mantuvo su gestión por el precio de la misma.
“Fíjense ustedes que no lo hacía ni de malo, ni de rencoroso, ni quedó mal quistado”, dijo CFK sobre Costa al referirse a su posición con el sector yerbatero. Y agregó: “Simplemente hay que saber los intereses que uno representa y defenderlos”.
La vicepresidenta también recordó en Chaco que “tuvimos una devaluación en enero de 2014 y la inflación ese año se nos fue a 38%, pero al año siguiente la bajamos a 24% y 25%, una tarea de Axel y de Augusto Costa muy buena”.
Este domingo, Costa compartió el fragmento de la charla en que la vicepresidenta lo nombró y señaló que “en su extraordinaria disertación del viernes pasado en Chaco, Cristina nos recordó algo que jamás puede perder de vista un funcionario y un militante de un proyecto colectivo: cuáles son los intereses que representa”.
“Con nuestros aciertos y nuestros errores, cada vez que nos tocó asumir alguna responsabilidad de gestión no dudamos: toda política y toda medida que se tome tiene que contribuir a mejorar las condiciones de vida de la gente, priorizando siempre a los que menos tienen”, indicó el funcionario de Kicillof.
Y agregó: “Gracias Cristina por empujarnos a ser mejores y a no conformarnos nunca. Y aunque todavía no me lo dijo, estoy seguro de que mi hija también va a estar muy agradecida por una anécdota que guardará toda su vida”. (DIB) MT
Tenés que iniciar sesión para comentar.