La Inspección General de Justicia, el organismo oficial que se encarga de regular la operación de todas las empresas, consiguió la intervención de Generación Zoe y Zoe Capital, dos de las empresas del prófugo Leonardo Cositorto, investigadas por supuesta estafa piramidal a miles de ahorristas, a los que prometían ganancias exorbitantes.
También logró la inhibición de los bienes del empresario que estaría en estos momentos en Colombia y que tiene pedido de captura internacional por presuntas estafas reiteradas y asociación ilícita, y de Maximiliano Batista, su socio, de quien no se sabe dónde está.
La decisión fue tomada por el juez en lo Comercial, Pablo Frick, quien dispuso la intervención por seis meses de Generación Zoe S.A. y Zoe Capital S.A. y decretó la inhibición de bienes de Cositorto y Batista, ambos prófugos en la causa que se inició en la localidad cordobesa de Villa María.
La IGJ había iniciado las acciones contra esas dos empresas el viernes de la semana pasada, solicitando con urgencia su intervención judicial. El requerimiento del organismo también apuntó contra los responsables de esas firmas.
Esta semana, Cositorto, dijo que el fidecomiso de la compañía quedó congelado y que analizarán los pagos que tienen pendientes. Desde un Zoom probablemente de Colombia, donde se estima que está, y mientras sigue prófugo de la Justicia, el ceo de Generación Zoe anunció además la creación de una nueva firma llamada Sunrise Coach en la que recibirán inversiones hasta US$ 3600 por persona con un rendimiento mensual del 7,5%, el mismo que otorgaba Zoe.
“Lo viejo quedó paralizado y lo vamos a estar cumpliendo en el tiempo, renegociando. A quienes quieran les vamos a pasar US$2000 a Sunrise. No nos borramos, ni le robamos a nadie. Lo que le han robado es la esperanza a la gente”, continuó en una insólita defensa y mientras cada vez son más las personas que reclaman el dinero que pusieron en Zoe. En cuanto a la supuesta reestructuración de Generación Zoe, dijo que están en negociaciones con fondos y que se están desprendiendo de cosas para poder avanzar.
Siempre con explicaciones confusas mediante Zoom y por un canal de YouTube, Cositorto le habló a sus fieles con un lenguaje místico y a través de presentaciones de Power Point plagadas de errores ortográficos. En su última aparición, volvió a cargar contra Pablo Salum, un militante contra las sectas, Javier Smaldone, un programador muy activo en Twitter y contra un personaje anónimo de esa red social @ betomendeleiev_. A ellos y a los medios acusó de la caída estrepitosa de su empresa.
Hasta el momento suman 17 los detenidos en la causa que se investiga a Generación Zoe por presuntas “estafas reiteradas y asociación ilícita. (DIB) FD