El Gobierno sigue de cerca los primeros pasos de la investigación sobre la muerte de al menos 17 personas que fallecieron súbitamente después de haber consumido cocaína adulterada o envenenada. Pese a que la primera hipótesis hablaba de una posible guerra entre bandas narco, fuentes oficiales dijeron que hasta el momento no hay evidencias que permitan sostener esa hipótesis.
Desde el Ministerio de Seguridad, que conduce Aníbal Fernández, se pusieron a disposición de la Policía bonaerense para ayudar en la investigación, aunque por el momento el ministro no llamó al responsable de la Seguridad bonaerense, Sergio Berni, con quien afirmar mantener una “excelente” relación, pese a los cruces que protagonizaron en público.
“Estamos ayudando en lo que podemos, por ahora no hay nada. Hay que esperar”, dijeron desde Seguridad.
Fuentes policiales confirmaron hasta el momento la muerte de al menos 17 personas y otras 50 permanecían internadas. Las personas fallecidas habrían comprado la droga en el mismo lugar, según pudieron reconstruir los investigadores en las últimas horas.
“Se pone en conocimiento de la población que se ha determinado que circula una sustancia comercializada como cocaína de altísima toxicidad”, sostuvo la Fiscalía General de San Martín en un comunicado de prensa.
Una de las hipótesis que trabajan fuentes de la investigación “sugiere que un lote de estupefacientes sufrió una adulteración por parte de un narco para arruinar el negocio de un rival y despejar el territorio de competidores”.
Aunque desde el gobierno nacional relativizaron esa información. “No hay elementos para asegurar eso. El que diga eso ahora miente”, aseguraron fuentes oficiales.
La pesquisa comenzó hoy tras el fallecimiento de cuatro personas internadas en el Hospital Municipal San Bernardino de la localidad de Hurlingham. Según las declaraciones de los médicos que los atendieron, todos coincidieron en que habían tomado cocaína durante una reunión.
En medio de la alarma, Berni advirtió que quienes compraron droga en estas últimas 24 horas “tienen que descartarla”. (DIB)