La Corte Suprema de Justicia de Santa Fe anuló la condena a 21 años y 6 meses de prisión a Manuel Mansilla por el femicidio de su novia, la adolescente Chiara Páez, cuyo crimen dio origen al movimiento “Ni Una Menos”. Asimismo, ordenó que la misma sea nuevamente establecida pero por un tribunal de la Justicia de Menores.
El fallo de la Corte establece que es aplicable al caso una sanción correspondiente a la “tentativa de homicidio”, cuya escala penal va de 10 a 15 años, al fundar su resolución en el artículo 4 de la ley 22.278 sobre el régimen juvenil penal.
Mansilla -que al momento de cometer el femicidio de Páez tenía 17 años- podría acceder en corto tiempo al beneficio de salidas transitorias dado que está por cumplir la mitad de la condena, aunque todavía otro tribunal debe establecer el nuevo monto de la pena.
Por su parte, Verónica Camargo, la madre de Chiara, dijo que se enteró del fallo por comentarios recibidos anoche y hoy por la prensa, y señaló: “Me indigna que la Corte no me haya notificado”. Sobre el fallo en sí, la mujer añadió que “la única niña era Chiara”, que cuando fue asesinada tenía 15 años.
“Un niño no actúa con la frialdad que actuó Mansilla, con las atrocidades y aberraciones que le hicieron a Chiara”, dijo la mujer, quien también recordó “la frialdad” que él tuvo para llamarla a ella y decirle que “Chiara no había regresado a su casa, cuando recién la había matado”.
“Eso no es un niño”, enfatizó Camargo, y agregó: “Pensar que dentro de poco me voy a cruzar a Mansilla acá (en Rufino, donde reside) o en Venado Tuerto, donde están los padres, es terrible.”
La madre de Chiara cuestionó al sistema judicial, que “después de semejante asesinato no le den el valor a la vida” y sostuvo que “por eso sigue habiendo tantos femicidios y hechos de violencia”.
Camargo adelantó que está analizando “apelar” la resolución del máximo tribunal provincial para “revocarlo”.
“La verdad que es terrible, lo único que sé es que no tengo más a mi hija, que me quitaron la posibilidad de ser abuela -si bien tengo otra hija-, me quitaron todos los proyectos que teníamos con Chiara juntas”, concluyó la mujer.
El fallo del máximo tribunal santafesino es consecuencia de un recurso de inconstitucionalidad interpuesto por la defensora General de Menores, Gabriela Del Castillo, quien cuestionó la confirmación de la condena a Mansilla por parte de la Cámara Penal de Rosario.
El caso
Chiara desapareció la madrugada del 10 de mayo de 2015 en Rufino luego de salir con un grupo de amigas y decirles que iba a encontrarse con su novio, Mansilla, que entonces tenía 17 años.
Ese domingo la familia denunció que la adolescente no había regresado a su casa y la Policía rastrilló el pueblo junto a los vecinos para encontrarla.
El cuerpo apareció horas después enterrado en el patio de la casa familiar de Mansilla quien, según la Justicia, la mató a golpes.
La autopsia determinó que Chiara había tomado un antiinflamatorio utilizado para abortar, pues cursaba un embarazo de ocho semanas que su madre había aceptado, pero que la familia de su novio no quería que continuara.
La sentencia del juez Prado sostuvo que Mansilla “mató a Páez despreciando su condición de mujer y conociendo su embarazo” y agregó que “no mostró un sincero arrepentimiento”.
El femicidio de Chiara generó tal conmoción nacional que el 3 de junio de 2015 se llevó a cabo la primera marcha del “Ni Una Menos” contra la violencia de género que tuvo su epicentro frente al Congreso, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde se reunieron unas 300 mil personas.
También hubo movilizaciones simultáneas en casi 100 ciudades de todo el país luego de que la convocatoria tuviera una amplia difusión por las redes sociales y medios de comunicación, contara con la adhesión de distintas organizaciones feministas y sociales, además de figuras públicas como artistas, deportistas, periodistas y dirigentes políticos. (DIB) ACR