Se inauguró otro pabellón literario en Olmos y ya hay 40 en cárceles bonaerenses

Se trata de una iniciativa enmarcada en el programa “Pabellones Literarios para la Libertad”, con el que se busca “promover espacios de lectura y escritura” como parte del tratamiento destinado a la formación integral de los internos.

Con un encuentro virtual del que participaron 40 personas privadas de la libertad se inauguró el tercer pabellón literario en la Unidad 1 Olmos del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), en una iniciativa impulsada por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires. De esta manera, ya son 40 estos pabellones existentes en cárceles de la provincia de Buenos Aires.

Esta iniciativa se enmarca en el programa “Pabellones Literarios para la Libertad”, que “se desarrolla en las cárceles bonaerenses con el fin de promover espacios de lectura y escritura como parte del tratamiento penitenciario destinado a la formación integral de los internos”, según informó el SPB en un comunicado.

El nuevo pabellón literario se suma a los dos ya existentes en esa cárcel y está integrado por 40 residentes del pabellón 11, del primer piso del penal que, además de “abordar la práctica sostenida de lectura y escritura como herramientas transformadoras, cuenta con el acceso a bibliografía a través de una biblioteca propia y distintos talleres relacionados”.

Reunión virtual

De la inauguración participaron vía Zoom la asesora del ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia, Julia Lescano, el director general de Asistencia y Tratamiento del SPB, Pablo Bonafé, el director de Cultura y Deporte, Walter Bertolotto, la jefa de Departamento Cultura, Gabriela Ríos, el juez del Tribunal N° 7 de Lomas de Zamora, Roberto Conti, también impulsor de la iniciativa junto al capellán general del SPB, Carlos Pont Gasques.

“Para nosotros es un reafirmar el compromiso, cada vez que se inaugura un nuevo pabellón literario. Entender que no es un mero taller que trabaja sobre la literatura, sino que se amplía a que no haya violencia. Eso hace que la gente  voluntariamente decida donar libros a la cárcel, comprometiéndose con esta realidad”, expresó Conti al  dar inicio a la reunión virtual.

También participaron vía online el capellán Juan Ferri y las talleristas que acompañan el proyecto junto a los privados de libertad, quienes desde las instalaciones del colegio de la cárcel, se conectaron para manifestar en la voz del interno Pablo su agradecimiento y entusiasmo por formar parte de esta propuesta.

“No necesitan un arma porque tienen la palabra”

Julia Lescano, en representación del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, les habló a los internos: “Es importante que el día que salgan, por favor convenzan a la sociedad a través de las palabras, del cambio que han hecho. Que esto es verdad, y que estas iniciativas funcionan. Que ya no necesitan un arma porque tienen la palabra”. Y agregó que con el ministerio “estamos convencidos que este es el único camino: la educación, que modifica la vida de las personas”.

En tanto, Bonafé recordó que “hoy ya son 40 los pabellones literarios inaugurados (…) Eso llevó a registrar menos violencia, mejoras en la convivencia y  observar en la estadística que a mayor nivel educativo menor el índice de reincidencia.  El pabellón literario nos ofrece eso, una nueva forma de vida y que el tiempo en contexto de encierro se puede capitalizar para obtener nuevas herramientas para reinsertarse en la sociedad y no reincidir.”

Por último, Ríos, cerró la jornada con el planteo de un objetivo claro. “Estos pabellones tienen que llegar a todas las unidades de la Provincia. Así que esa es nuestra meta, ya superamos la mitad de las unidades y pronto completaremos este objetivo con más inauguraciones”. (DIB) MM

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