Pablo López dijo que la dinámica del virus y la geopolítica de las vacunas generan incertidumbre y desbarata la recuperación de algunos sectores. Pero aseguró que la economía de la provincia se recuperará respecto de 2020 en los niveles en que estaban previstos. Y explicó, en diálogo con DIB, la lógica detrás del paquete de ayuda de $ 70 mil millones que lanzó Axel Kicillof.
¿Cuál es el diagnóstico sobre el impacto de la segunda ola en la economía de PBA detrás del nuevo paquete de ayuda?
Básicamente, venimos de una crisis que lleva tres años, que empieza en 2018 y se acentúa el año pasado por la pandemia. En esos años la economía bonaerense cayó 14 puntos, lo cual es muy fuerte. A fines del año pasado empezamos a ver cierta a recuperación de sectores específicos, industria y construcción sobre todo. Pero a partir de marzo, esa recuperación está experimentando límites producto de la pandemia.
Pero se sabía que iba a ocurrir…
Es cierto que se veía venir, pero el nivel de incertidumbre es alto igual. La forma que impacta tiene que ver por ejemplo con las nuevas cepas, y eso era difícil de verlo el año pasado. El proceso de vacunación, dada la situación de producción y logística global, también genera incertidumbre.
En resumen, la recuperación se detuvo.
No, el diagnóstico es que la recuperación sigue, pero no es completa y además la segunda ola impacta ralentizando los sectores que dependen más de la circulación de la gente.
¿Hay alguna manera de mensurar ese impacto?
Es una situación inédita, muy del día a día muy difícil de mensurar por eso. Veníamos previendo un año de crecimiento, donde no se llegaba a recuperar lo perdido en 2020 en términos de actividad pero si la mitad. Ese escenario sigue vigente: Impacto sectorial pero recuperación de parte de lo perdido en 2020.
Cuál es la lógica económica del paquete
El paquete que lanzamos apunta más a sostener a sectores sociales vulnerables ampliando los programas del ministerio de Desarrollo de la Comunidad, y por otro lado a medidas para el sector productivo. El Estado tiene que ponerse al frente en este momento, lo hacemos desde que llegamos al gobierno, pero más ahora justamente porque la pandemia puso las cosas más complicadas.
¿Hay un número de cuánto debieron aumentar las transferencias directas a las familias en este contexto?
Para dar una idea, solo en lo que hace al Servicio Alimentario Escolar teníamos previsto invertir este año 32 mil millones de pesos, que con la decisión de ahora de aumentar la cobertura hasta llegar a más de 2 millones de niños y niñas probablemente termine en una inversión de $ 40 mil millones.
¿Una inversión no prevista de $ 70 mil millones obliga a hacer ajustes en otros renglones?
Hay que aclarar primero que esa inversión incluye los programas que está poniendo en marcha el Banco. El desempeño de la recaudación fue bueno en el primer trimestre, lo que nos permite lanzar esto sin que a priori se vea afectada ninguna de las inversiones importantes que está haciendo la Provincia, especialmente en infraestructura. Además, si fuese necesario en el transcurso del año podemos acceder al mercado de deuda local.
¿El año pasado la Provincia podría hizo asistencia directa a municipios, eso se podría repetir ahora?
Esa asistencia tuvo que ver con un contexto particular de enorme caída de la recaudación que sufrimos todos. Hoy no vemos eso.
“Con las tarifas hay que ser muy cuidadosos”
Hay un debate por el manejo de la política tarifaria nacional abierto, con gran impacto en la Provincia porque todo el Conurbano tiene la tarifa eléctrica regulada por la Nación. Tiene que subir más o menos que 9%
Claramente venimos de casi dos años de congelamiento, pero a su vez previamente se han visto, en el gobierno de Macri y Vidal, incrementos tarifarios enormes con un impacto en los bolsillos muy grandes, sobre todo en los sectores más vulnerables. Hay que poner en la balanza también las inversiones que hicieron y las que no se hicieron las empresas y el contexto tan complejo en términos sociales que estamos viviendo hoy. Por eso, hay que ser muy cuidadoso, hay gran cantidad de bonaerenses que están sufriendo. Creo que un aumento de un dígito es una medida razonable. (DIB)