Luego del anuncio del cierre por tiempo indeterminado de la Clínica de la Comunidad de Ensenada donde días pasados hubo una “pueblada” por presuntas muertes por mala praxis, el personal sanitario se manifestó para defenderse de las acusaciones de los vecinos. Así, los trabajadores se movilizaron este jueves y reiteraron que “no somos asesinos”.
El nosocomio en cuestión se encuentra ubicado en la calle La Merced altura 383 y se convirtió en escenario de furia vecinal. Por dicho motivo las autoridades decidieron cerrarlo y comenzaron a trasladar a los pacientes.
Renzo Rodríguez, técnico de rayos del centro médico, dijo este jueves a El Día que “hace dos días tuvimos incidentes en la clínica. Familiares de pacientes que fallecieron nos amenazaron, diciendo que les matamos a sus familiares. Así no podemos trabajar”. En ese sentido aseguró que “el director nos dijo que no podía tener la clínica abierta porque no podía garantizar la seguridad”.
Según contó Rodríguez “venimos a protestar para poder trabajar tranquilos. Todavía hay pacientes porque algunos fueron recién operados, por eso seguimos trabajando”. Asimismo se quejó porque “no puede ser que en medio de la pandemia se nos acuse de que matamos pacientes. Encima de todo tenemos que sufrir la amenaza de los familiares. Acá pueden venir a buscar las historias clínicas”.
“No puede ser que en medio de la pandemia se nos acuse de que matamos pacientes”.
“No podemos garantizar la seguridad”
Ayer el director de la institución sanitaria, Juan Manuel de Rosas, tomó la determinación de cerrar las puertas de la clínica “por no poder garantizar la seguridad de los trabajadores”. La medida se prolongará por tiempo indeterminado y en este sentido, De Rosas en diálogo con 0221.com.ar sostuvo que el episodio de violencia no estuvo relacionado con las denuncias disponibles en la Fiscalía acerca de los fallecimientos sucedidos en el nosocomio el 26 de abril. “Inclusive los mismos familiares se despegaron del escrache y han recibido presiones”, profundizó el director.
“El equipo de salud no puede trabajar porque está en riesgo su integridad. No se animan a firmar un certificado de defunción y no podemos permitir que se hagan públicas denuncias falsas sobre la existencia de una clínica donde hay supuestos asesinos a cargo de los pacientes”, aclaró Rosas. (DIB) MM