Un vecino de la ciudad de Pehuajó, en el noroeste bonaerense, compró un mueble usado en un comerciante del que era cliente hacía años. Pero al llegar a su casa, en uno de los cajones, se encontró con una sorpresa: En dos sobres prolijamente guardados había una pequeña fortuna de 7213 dólares y 180 mil pesos.
El protagonista de la historia es Gustavo Rovira, que vive en la zona rural del distrito pero se fue hasta el pueblo porque su madre necesitaba una cajonera para guardar cosas. El también quería acomodar algunos elementos personales así que aprovechó para matar dos pájaros de un tiro.
El martes, Gustavo y su mamá llegaron en una camioneta al local de un conocido al que suelen comprarle cosas. Encontraron el segundo y el cuarto mueble de una fila y se los llevaron, satisfechos de haber encontrado lo que necesitaban. No fueron directo al campo: Como era temprano, durmieron una siesta en la casa que tiene en la ciudad, con los muebles expuestos en la caja de la camioneta.
Eduardo contó a través de su cuenta de Facebook que una vez en el campo, se puso a lijar el mueble para después pintarlo. Pero en el proceso, en uno de los cajones se encontró con dos los sobres con los de 7213 dólares y 180 mil pesos, de acuerdo a lo que publicó el sitio local 365 Pehuajó.
El hombre contó que no pudo dormir en toda la noche: Recién a las 5 de la mañana concilió el sueño. Cuando se despertó, a las 8, lo estaba llamando el dueño de la plata. “Quedate tranquilo, acá está, no te avisé anoche porque era muy tarde cuando la encontré”, le respondió.
Un detalle resulta asombroso: Antes de llevarse el mueble, Gustavo y el vendedor recordaron una historia ocurrida en Juan José Paso, un pueblo del partido de Pehuajó. Un hombre vendió un inodoro, con un montón de dinero adentro, escondido. Si pasa lo mismo y hay plata la devolvés, le dijo el vendedor. Y así fue. (DIB) AL