Juntos por el Cambio salió al cruce de las críticas de Cristina Kirchner y Alberto Fernández a la Justicia, y aseguró que hay un intento del oficialismo por realizar una “reforma constitucional que rompe definitivamente el sistema democrático”.
En un nuevo encuentro de la Mesa nacional de la fuerza opositora se abordó casi con exclusividad el fuerte cuestionamiento del kirchnerismo a la Justicia, que se inició el miércoles pasado con una carta pública de la vicepresidenta, que luego fue respaldada por el Presidente Alberto Fernández y parte del gabinete.
En un comunicado emitido tras el encuentro, Juntos por el Cambio señaló que “la carta de la vicepresidenta, avalada por el Presidente, es un intento de cambio del sistema constitucional de división de poderes, por un sistema de reforma constitucional que rompe definitivamente el sistema republicano”.
De la reunión virtual volvieron a verse las caras el expresidente Mauricio Macri y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. También se encontraban entre los asistentes los representantes de la UCR y la Coalición Cívica.
En el comunicado, Juntos por el Cambio aseguró que “el fin último” de las críticas hacia la Justicia es “cambiar la Constitución”, y apuntó en este sentido al trabajo del comité de expertos a los que el Presidente le encargó un estudio para la reforma del Poder Judicial y, particularmente, de la Corte.
“Juntos por el Cambio tendrá la firmeza institucional para impedir que este clima hostil contra el máximo tribunal se transforme en hechos concretos de ataque y cambios constitucionales”, indicó el comunicado.
Para la fuerza liderada por Mauricio Macri, el objetivo del Gobierno es “la búsqueda de la impunidad a través del intento de que la Justicia transforme los casos de corrupción en casos de ‘Lawfare’, una teoría inventada que sostiene que los hechos de corrupción serían una persecución política”.
Sobre la carta de CFK en particular, señalaron: “Las manifestaciones de la vicepresidenta tienen una gravedad institucional inusitada, pues suponen el más grave ataque a la independencia de la Justicia ocurrido desde la recuperación democrática hasta el presente”.
La semana pasada, Cristina Kirchner apuntó contra el máximo tribunal del país y señaló que el “lawfare” se encuentra “en su apogeo”, al tiempo que señaló que “se protege y garantiza la impunidad a los funcionarios macristas que durante su gobierno no dejaron delito por cometer, saqueando y endeudando al país y persiguiendo, espiando y encarcelando a opositores”.
Al día siguiente, Fernández respaldó los dichos de su vice, al manifestar: “En la Corte Suprema la apertura de los recursos tiene un nivel de discrecionalidad pasmosa, que no puede tolerarse y seguir aguantándose, y que debe ser corregido, regulado. Eso va a ser en favor de la Corte”. (DIB)