Luego de que se implementaran las nuevas restricciones en Tandil en el marco del estadio rojo del propio sistema de fases para contener la pandemia, el gobierno del intendente Miguel Ángel Lunghi anunció la modificación del esquema de controles en los puestos sanitarios de los accesos y dentro de la ciudad, al tiempo que dispuso monitoreos domiciliarios para que se cumpla el aislamiento.
La situación se agravó notablemente en las últimas semanas en Tandil, donde la curva de contagios ha registrado un considerable aumento que llevó los casos activos de covid-19 a más de 1.000.
El control domiciliario de los casos positivos lo realizará un equipo de voluntarios, que se desempeñaban en los puestos sanitarios, mientras que la policía se ocupará del control domiciliario de los contactos estrechos.
A su vez, la policía desarrollará un control aleatorio y dinámico a cualquier ciudadano en la vía pública, para establecer si se cumple con el aislamiento domiciliario. Para esto se utilizará la información cargada por el Sistema Integrado de Salud Pública en la plataforma “Coronavirus Tandil”.
Asimismo efectivos de las fuerzas de seguridad se ocuparán de los controles del cumplimiento del régimen horario e infraccionarán por violación del artículo 205 del Código Penal a todas las personas que circulen entre las 18.00 y las 7 hs. sin la autorización o justificación correspondiente.
Mientras tanto los agentes de diversas áreas comunales estarán a cargo de los controles de cumplimiento de los protocolos sanitarios en cada uno de los sectores económicos.
Asimismo, un gran grupo de voluntarios de diferentes instituciones de la ciudad, recorrieron diversas zonas de la ciudad para la entrega de barbijos, el principal elemento de protección, una iniciativa sugerida por el Comité de Seguimiento de Covid-19 de Tandil.
En total participan unos 100 voluntarios divididos en grupos recorren diferentes zonas de la ciudad, entregando folletería con información importante sobre la enfermedad y las medidas de prevención y tapabocas a las personas que no lo tienen.
Durante lo que va de la campaña ya se entregaron unos 4.000 barbijos, que son confeccionados a partir del trabajo conjunto de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat con mujeres voluntarias, que forman parte de talleres textiles que se acompañan desde esa repartición con la provisión de maquinarias e insumos. (DIB) MCH