El presidente Alberto Fernández respaldó hoy al gobernador Alex Kicillof y a su ministro de Seguridad, Sergio Berni, tras el desalojo del predio usurpado en la localidad de Guernica, que llevó adelante la policía bonaerense y que había generado críticas de sectores afines al oficialismo y también en organizaciones de derechos humanos, algunas de las cuáles plantearon incluso una demanda por uso abusivo de la fuerza.
El respaldo de Fernández se hizo explícito de modo presencial al participar este mediodía de un acto de entrega de patrulleros para el municipio de Lomas de Zamora, del que participó también el intendente Martín Insaurralde, el primero –y uno de los pocos- en hacer explícito su apoyo a la provincia, a través de un comunicado en el que señaló que “la usurpación ilegal es inadmisible”.
Ahora, Fernández se fotografió junto a Kicillof y a Berni, con Insuarralde, la ministra de Seguridad nacional Sabina Frederic y el jefe de Gabinete Santiago Cafiero posando en un segundo plano de una imagen en cuyos márgenes aparece dos efectivos mujeres de la Bonaernse, la fuerza que realizó el operativo de desalojo, que produjo 35 detenciones –todas esas personas ya fueron liberadas- y algunos heridos, ninguno de consideración.
Fue una señal inequívoca de respaldo de lo actuado por el gobernador y su ministro, en el punto más conflictivo de todo el dispositivo que se montó en torno a la toma, el uso de la fuerza para sacar del predio a las familias que no acordaron una salida consensuada.
El gesto de Fernández llega inmediatamente después de que algunos dirigentes vinculados al kichnerismo criticaran duramente el accionar policial. Luis D´Elia llegó a decir que cada bala –de goma- que se disparó el Guernica “impactó en el cajón de Néstor Kirchner” y el exvicegobernador Gabriel Mariotto que “cuando asistas sin inmutarte a un desalojo ya formas parte del enemigo”.
Además, dos organismos de Derechos Humanos, el CELS, que preside el periodista Horacio Vertbitsky, cercano a las posiciones del gobierno nacional, y el Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), cuyo alma matter es el premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel plantearon una demanda por uso abusivo de la fuerza ante el juez que ordenó el procedimiento, Martín Rizzo. La Comisión Provincia por la Memoria, por su parte, emitió un comunicado en el que “repudió” el desalojo, al igual que Hebe de Bonafini, la titular de Madres de Plaza de Mayo.
Ayer, Kicillof había dicho que el procedimiento “se hizo con todos los cuidados para evitar heridos y violencia” y que si no se avanzaba con el cumplimiento de la orden judicial el Ejecutivo hubiese incurrido en “desacato”.
Bien temprano esta mañana, el presidente había respaldado a Kicillof a través de un posteo en sus redes sociales, pero en esa oportunidad no había mencionado a Berni, sino qu había destacado el trabajo el ministro de Desarrollo de la Comunidad de la Provincia, Andrés “Cuervo” Larroque, que estuvo a cargo del operativo previo para avanzar con el desalojo voluntario.
“Lo ocurrido ayer en Guernica fue producto del accionar policial dispuesto por la Justicia. Previo a ello hubo un enorme trabajo de reubicación de familias realizadas por el Ministro @larroqueandres. El gobernador @Kicillofok tuvo la prudencia de mantenerme informado”, indicó Fernández en un posteo en el que se quejó de que el portal Infobae insinuó “fisuras o contradicciones política” al respecto.
En esa comunicación, el presidente había coincidido con el argumento de Kicillof respecto de que fue la Justicia la que impuso al Ejecutivo la realización del operativo de desalojo compulsivo, algo que fue rechazado por el titular del Comité contra la Toirtura de la CPOM, Cipriano García, quien señaló, al igual que algunos de los abogados que defendieron a os participantes de la toma., que la provincia incumple a diario órdenes judiciales y que por eso debería haber incumplido esta también. (DIB) AL