Camioneros bloqueó cinco plantas de Mercado Libre en Capital y el Conurbano

Reclama por la afiliación de unos 1.500 empleados que están bajo otro convenio laboral. La empresa asegura que habrá atrasos en los envíos.

El gremio de Camioneros bloqueó hoy cinco plantas de distribución de Mercado Libre, en el marco de un reclamo por la categorización gremial de unos 1.500 trabajadores de la empresa.

Mercado Libre, la empresa de mayor valor bursátil del país, denunció el bloqueo de cinco de sus centros de distribución, ubicados en Munro, Villa Alsina, Lanús, Sarandí y Parque Patricios.

El reclamo gira en torno a la afiliación sindical de 1.500 trabajadores el centro de almacenamiento de Villa Madero, hoy enrolados en la Unión de Trabajadores de Carga y Descarga. Camioneros quiere sumarlos bajo el convenio colectivo propio, al igual que otros 5.000 trabajadores de la compañía.

A través de un comunicado, el mayor “unicornio” argentino indicó que “varios Centros de Distribución que operan para Mercado Libre fueron bloqueados de manera ilegal por el Sindicato de Camioneros. En consecuencia, la distribución de productos desde esos Centros se encuentra totalmente interrumpida, afectando el trabajo de miles de PyMEs que tienen como principal fuente de ingresos la venta de productos online en esta pandemia”.

“Hay un impacto directo en los millones de compradores que dependen de Mercado Libre para recibir productos esenciales en este contexto”, sostuvo la empresa de Marcos Galperín, al tiempo que sostuvo que “este accionar perjudica en forma directa a la cadena de valor del comercio electrónico, que incluye a cientos de empresas y personas que viven del transporte, en su mayoría afiliadas al Sindicato de Camioneros”.

El año pasado la administración de Mauricio Macri dio por terminado los reclamos de Camioneros, pero el sindicato continuó desplegando acciones para materializar su planteo. En medio de la protesta, Pablo Moyano indicó que “hay cerca de 600 trabajadores que cobran entre $ 25 y 30 mil pesos cuando deberían recibir el doble. Esto es flexibilización, con sueldos miserables, horas sin ningún tipo de control”.

Además, denunció que los empleados “están en negro, los anotan como monotributistas para eludir impuestos y están encuadrados en otras organizaciones gremiales cobrando la mitad de lo que deberían”. (DIB)

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