El gobernador Axel Kicillof dio detalles este viernes del avión con un cargamento de 13 toneladas de insumos médicos que la provincia de Buenos Aires compró de manera directa en China, sostuvo que fue un operativo complejo en el que se corrieron riesgos y adelantó que ese vuelo no será el único.
“Lo tengo que decir en criollo, estuvimos cortando clavos hasta ayer a las 6 am en contacto con la tripulación del avión, con las autoridades del consulado allí en Shangai, en contacto con los proveedores, con los intermediarios, con las fábricas”, dijo Kicillof en diálogo con la prensa.
“La verdad es que ha sido una operación de muchísima complejidad y mucho riesgo. Hoy hemos visto en el mundo cómo se suceden hechos tragicómicos, donde un avión comprado por un país es retenido por otro, porque hay una especie de situación de desesperación con respecto a los insumos médicos y al equipamiento médico”, amplió.
Es que la confiscación de los insumos era una posibilidad que ya había sido adelantada por Pablo Biró, secretario General de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), quien formó parte del operativo.
“Van a ser 55 horas de vuelo y vamos a estar arriba del avión prácticamente tres días. Y en muchos lados están afanando la carga: pasó en Alemania, Turquía y Estados Unidos. Queremos hacer el vuelo bien. El desafío es doble: hacer el vuelo y que no nos confisquen los insumos. Estoy ilusionado con que todo salga bien”, había dicho Biró en un audio para la tripulación que se conoció esta semana.
Kicillof precisó que en el cargamento hay más de un millón de barbijos para el uso general, unos 150 mil del modelo KN 95 para tareas de mucha exposición virológica y otros 120 mil protectores tipo antiparras. También la Provincia habría comprado kits para realizar los testeos rápidos.
“Esto es lo que viene en un primer vuelo, pero lo que hay es un verdadero puente aéreo que día por medio va a ir buscando estos insumos que la provincia de Buenos Aires ha ido comprando. Las cantidades totales superan las 400 toneladas”, dijo por su parte el ministro Daniel Gollan.
“Hemos reaccionado muy rápidamente para llevar adelante una compra directa que es inédita de la provincia de Buenos Aires a China. Solo una aerolínea de bandera es capaz de hacer lo que está haciendo ahora Aerolíneas Argentinas. Algún día contaremos las peripecias que ocurrieron y los riesgos que se corrieron”, señaló Kicillof, quien sostuvo que el Gobierno no quiso dar precisiones sobre el operativo con anterioridad por miedo a que no saliera con éxito.
Como informó DIB, el gobernador confirmó que el avión de Aerolíneas Argentinas ya estaba camino de regreso. Poco después de la una de la madrugada de la Argentina y tras casi 30 horas de vuelo, el Airbus 330-200 de Aerolíneas Argentinas aterrizó en el aeropuerto de Shangai, China, donde tras concretarse la carga partió de regreso. Fue la primera vez que la aerolínea de bandera realizaba un vuelo a ese país. Se estima que el próximo sábado el avión estará aterrizando en Ezeiza.
La travesía comenzó el miércoles 15 cuando a las 18.30 partió el vuelo AR1070 con destino a Shangai. El vuelo tuvo una escala en Auckland, Nueva Zelanda para la carga de combustible. Ese trayecto tuvo una duración de 16 horas y media y fue más extenso de lo previsto por los fuertes vientos en contra que se encontraron.
Aún así la aeronave llegó sin inconvenientes a ese aeropuerto desde donde despegaron una vez que cargaron el combustible. A partir de ese momento el trayecto hasta Shangai significaron unas 13 horas y 11 minutos de vuelo por lo que el viaje completo se realizó en 29 horas y 42 minutos.
La tripulación del vuelo de Aerolíneas fue en su totalidad voluntaria. Participan los comandantes Pablo Biró, secretario General de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA); Eduardo Jorge Ravera, Juan Pablo Mazzieri y Fernando Carrea.
La integran ocho copilotos: Eduardo García, Miguel Ángel Dimoulas, Víctor Antonio Saavedra, Guillermo Masnata, Nicholas Daich, Guillermo Granara, Víctor Javier Mantello y José María Aguer. También participan el jefe de carga, Fernando Simone, los técnicos aeronáuticos Gabriel Castelnuovo, Oscar Giordani, Mariano Torres, el inspector José Ackerl y la despachante de aeronaves Analia Fronti. (DIB) MCH