La Plata, nov 28 (DIB).- A un mes para que termine el año, ya son más del doble los hechos de
vandalismo en escuelas bonaerenses en relación a los registrados durante 2018,
y la reparación de las instalaciones dañadas costará en total unos $ 202
millones.
El 5 de
noviembre desconocidos ingresaron a la Escuela Primaria N° 38 de Saladillo y
tras provocar varios daños se llevaron un monitor; el 11, fue incendiada la
Escuela Nº 5 de Tres Arroyos; algunos días después, tres colegios de Suipacha
registraron destrozos; y esta semana se vio afectada por extraños la Nº 27 de
La Plata.
Los casos de
vandalismo vienen en crecimiento. Según le indicaron a DIB fuentes de la
Dirección General de Cultura y Educación, alcanzaron los 312 hechos entre enero
y noviembre de 2019 y, por los destrozos, Provincia deberá invertir más de $
202 millones.
El número ya es
más del doble del de 2018, cuando hubo unas 131 escuelas vandalizadas y el
Gobierno tuvo que ejecutar unos $ 105 millones en reparaciones.
En este marco,
desde la cartera educativa señalaron que la situación genera “preocupación” y explicaron
que en estos casos se realiza la denuncia correspondiente para que sea la Justicia
quien investigue. Por otro lado, desde las escuelas se trabaja en la
concientización de la comunidad educativa sobre la importancia de cuidar los
establecimientos.
Proyecto de ley
con penas para padres
En marzo de este
año, el gobierno de María Eugenia Vidal presentó en la Legislatura un proyecto
de ley para incorporar sanciones contra padres y tutores por hechos vandálicos
en las escuelas.
La iniciativa
busca incluir dos artículos al Código de Faltas provincial. En uno de ellos,
propone sanciones de 5 a 30 días de cárcel o una multa de entre el 50% y 100%
del sueldo de un oficial subayudante de la Policía bonaerense a las personas
que “coloquen, introduzcan o arrojen sustancias insalubres o cosas capaces
de producir lesiones” en las escuelas o en sus inmediaciones.
El proyecto
también contempla de 2 a 10 días de trabajos de utilidad pública para aquellos
casos en que los contraventores no cuenten con condenas previas y cuando la
gravedad del caso no amerite arrestos o multas.
En tanto, la
reforma del Código prevé que cuando los autores sean menores de edad, sus
padres o tutores podrían ser castigados con un arresto de 1 a 5 días o con una
multa del 30% al 60% de los haberes de un oficial subayudante. Si hay
reincidencia por parte del chico, el la pena se duplicaría, pudiendo además
“imponérseles el cumplimiento de una terapia familiar”. (DIB) MT