Un cura de Bahía Blanca fue denunciado por abuso sexual por una catequista

La Plata, nov 19 (DIB).- El cura de la iglesia San Roque de
Bahía Blanca, Mauro Henrique Cantanhede Ferreira, fue denunciado en los últimos
días de abuso sexual por una catequista y el Arzobispado local ordenó que deje
de dar misas.

La acusación fue radicada la semana pasada en la Comisaría
de La Mujer bahiense y es investigada por la fiscalía especializada en Delitos
Sexuales.

En su acusación, la mujer señaló que comenzó a vincularse
con el sacerdote a mediados de mayo y que “mantenía un trato cordial, de forma
personal, como así también mediante mensajes de Whatsapp”.

Sin embargo, la catequista, según consta en la denuncia,
contó que luego “comenzó a sentir que este intentaba manipularla manifestando
constantemente que poseían una relación de amistad, donde ambos debían confiar
mutuamente en el otro”.

En este marco, cuando terminaban las misas en la parroquia,
el denunciado hacía que la llevaran en un auto particular hacia su domicilio, y
a mediados de agosto “le envió un mensaje desde su número de WhatsApp en el
cual le solicita que le envíe fotos de su cuerpo con ropa interior”.

“Todo era normal hasta que en un momento me pidió fotos
desnuda. Me decía que yo era su “Miss Bum Bum”, su chica con la cola grande.
Acepté mandarle esas fotos y me decía que tenía que ser una relación de
confianza, que me quería cuidar. Siempre hacía hincapié en eso y hasta me dijo
que el sexo anal no era pecado”, señaló la víctima en una entrevista al portal
local La Brújula 24.

En octubre, detalló la víctima, el cura se habría hecho
presente en su domicilio con el fin de “tomar un café y mantener una
conversación”, y en ese marco hizo “que ella se arrodille y le practique
sexo oral” mientras le sujetaba “fuertemente de la cabeza y de sus dos manos”
por lo que la misma “no podía zafarse”. La mujer dijo sentirse “sometida e
intimidada”.       

“Fue a mi casa, nos pusimos a hablar y me contó de su
infancia, hasta que en un momento le dije de sacarnos una foto como en la
parroquia. De golpe me sentó arriba suyo y me empezó a hablar como un nene. Eso
es lo que me da asco, yo no lo consentí. Me decía que estaba duro y me agachó
para arrodillarme. Me tapó los ojos mientras me obligaba a hacerle sexo oral,
me repetía que Dios sabía que yo era buena”, agregó la catequista.

Las autoridades eclesiásticas locales determinaron que el
cura deje de dar misas. “Quedó, al menos momentáneamente, afuera de sus
funciones. No obstante, cabe aclarar que no deja de ser sacerdote. La idea no
es ocultarlo, sino respetar el proceso y la situación que se está
desarrollando”, señaló la Canciller del Arzobispado en Bahía Blanca, Verónica
Orio. (DIB) MT