La Plata, ago 14 (Por Martín Raggio, de la redacción de DIB).- Palo Pandolfo con su banda La Hermandad se junta por primera vez para tocar con Acorazado Potemkin y se les suma Flopa Lestani. De la crisis y la revuelta surge el arte para hacer “elevar” a la gente que el 23 de agosto en el Teatro Bar de La Plata grupos de viejos colegas (Palo y Federico compartieron banda en Don Cornelio y la Zona) unen fuerzas en un show digno de un festival. El público, de parabienes.
Palo Pandolfo, Lulo Esain, Juan Pablo Fernández y Federico Ghazarossian charlaron en DIB sobre la “superfecha” que están por realizar en la capital bonaerense.
¿Cómo se craneó esta gran fecha, digna de festival?
Palo- De alguna manera con el “Ruso”, que es mi manager y trabajamos juntos hace dos años, entendimos que era una buena estrategia aliarse con gente afín.
Juan Pablo- Hay un universo y eso que dice Palo de aliarse y juntarse también tiene que ver con un contexto de crisis, quilombo. Entonces dijimos qué queríamos hacer, porque lo nuestro es tocar, que la gente se entusiasme con movidas más entusiastas.
Lulo- También sabemos que ese universo que escucha a Palo, nos escucha a nosotros y también a Flopa.
Ustedes recorren el país, pero para una fecha así vienen a hacerla a La Plata. ¿Es por distancia, costos, público, algo de esencia rockera de la ciudad?
Lulo- Un poco de todo, teníamos muchas ganas de hacer la fecha y la agenda de Capital estaba cubierta, entonces a la hora de decidirnos dijimos ¿qué plaza de peso hay? Y La Plata es el primer nombre que se te ocurre. Además se hizo siempre eso de compartir carteles.
Fede- Nosotros desde que empezamos compartimos fechas.
Palo- Es estar siempre en movimiento y generar cosas, y tocar en lugares grandes es siempre bueno.
Lulo- El lugar hace que las propuestas luzcan a mayor técnica la gente disfruta más.
Fede- Además La Plata es un crisol de personas que vienen a estudiar de todo Buenos Aires y nos vienen a ver y eso está bueno.
¿Influye el momento que atraviesa el país?
Juan Pablo- Encarar esto en Mendoza, Rosario, Córdoba está difícil, pero no nos gusta llorar, estar diciendo que mal que está todo. Si querés que critiquemos a Macri, lo criticamos porque no nos gusta. Pero siempre hay que salir a tocar, hay que encontrarle la vuelta, hay que estar en movimiento todo el tiempo.
Palo- Para mí está todo puesto en el yoga, eso es rocanrol. Digamos drogas que no tienen bajón, ni un segundo, es todo es beneficio para crecer. Primero es la música, después es el amor y por último la política. Hay una necesidad como músico de decir algo como colectivo, pero yo nunca utilizo el escenario o la herramienta musical para apoyar políticas, así lo vengo expresando desde el 81. Mis canciones son metáforas de cosas personales. Ahora como hombre de a pie voy a marchas, salgo cuando hay salir a la calle. Es un momento atravesado por la política y qué posición puede tomar uno desde una canción. Y te digo, como resumen político de nosotros es que no hay plata en la calle, para nosotros como músicos y productoras independientes estamos laburando “a borderó” como nunca, laburar a taquilla o sea a riesgo. Yo quiero que la gente se eleve, que sienta una vibración y que el arte es anarquía de plano ante la ley y el amor por igual, somos todos iguales.
Lulo- Nosotros vivimos atravesados por lo que pasa, pero creemos que no tenemos que tener una proclama al respecto. Yo cuando me subo a la batería te transmito mi sentimiento tocando.
¿De qué se trata ser rockeros a un quinto del siglo 21?
Juan Pablo- Yo no sé dónde quedó ese lugar de rebeldía, post punk o lo contestatario. Creo que estando en acción, produciendo obras, lo que hace uno es discutir las reglas de juego todo el tiempo, como en un boliche para tocar, desde un sello discográfico o de lo colectivo como organizar lo que uno hace. Cuando vamos, vamos, vamos, confrontamos sí o sí, con los pares, con los ajenos, con los ellos, con los nosotros y estás obligado a redefinir las reglas de juego todo el tiempo y no se en que estamos encasillados, pero es lo que sabemos hacer.
Fede- Lo bueno del rock es que todavía tenés algo que decir y la plataforma del rock es muy amplia. Y creo que habrá un futuro mejor, las cosas están cambiando, hay propuestas nuevas muy interesantes. Creo que va a ser cada vez peor para algunos y mejor para otros.
¿En qué proyectos anda cada banda?
Palo- Editamos el disco en vivo en Spotify que se llama “El vuelo del dragón”, que tiene temas de 1985 al 2015 y que de alguna manera es el tercer disco con la Hermandad. Y tengo pensado generar un tercer disco de estudio con la Hermandad. En este momento estamos con cambio de baterista con la vuelta de Federico Gil Solá, aunque no tiene tanta cintura para salir de gira, pero cuando toca suena con todo.
Juan Pablo- Un disco es la foto del momento de una banda, cuando nos encerramos a componer aparecen todos los temas que pasamos y hemos convivido: musical y personal, recuerdos, tristezas y alegrías se juntan ahí. Yo creo que cada disco de Potenkim es medio lo mismo, es el mismo formato y lenguaje siempre tratando de no repetirnos y descartando lo que nos parece que ya hicimos. (DIB) MR