La Plata, mar 11 (DIB/AMPLIACI??N).- Con banderas, bombos,
cánticos y fuegos artificiales, los jóvenes celebraron en escuelas de toda la
provincia de Buenos Aires el ??ltimo Primer Día (UPD) de clases, una movida que
se extendió en varias ciudades del país.
Este festejo que se originó hace unos años en San Juan y en
Mendoza, tuvo en la Plata uno de los puntos más coloridos, donde los alumnos
del último año del secundario festejaron el inicio del ciclo lectivo. Este año,
con máximo control de las autoridades municipales y de los padres ya que el
Municipio notificó a los colegios sobre su responsabilidad en caso de que se
registraran incidentes, los jóvenes le pusieron ruido a loa jornada desde
temprano.
Con bengalas, bombas de estruendo y banderas de todo tipo,
distintas divisiones de egresados coparon la entrada a las escuelas y en muchos
casos después confluyeron en Plaza Moreno, frente a la Catedral platense. Todo
se dio bajo la mirada de agentes de la Secretaría de Convivencia y Control
Ciudadano de la comuna, que vigilaron la celebración junto a algunos padres,
madres y docentes.
En Mar del Plata, los festejos también transcurrieron con
cierta normalidad y con un fuerte operativo en sitios estratégicos, como
Constitución y la Costa, para evitar desmanes. En este sentido, se ordenó a los
salones de fiestas que se abstengan de realizar eventos el domingo a la noche
en los que se permita el consumo de alcohol a menores de edad.
En Azul, al centro de la provincia, un fiscal le solicitó al
titular de la Jefatura Departamental Azul de la Policía que implemente
“operativos antinarcóticos”. La decisión fue dispuesta por Lucas Moyano,
el actual responsable de la Unidad Funcional de Instrucción número 22, quien
pidió que se implemente una medida similar en Olavarría.
Justamente en éste último distrito, los jóvenes se juntaron
en el Parque Mitre, donde realizaron un despliegue de color, música y banderas,
mientras que el epicentro en Bahía Blanca estuvo Plaza Rivadavia. En tanto,
localidades más pequeñas como San Pedro, Bragado, Laprida o Coronel Pringles
también atravesaron por el ruidoso festejo, aunque en general no se reportaron
incidentes.
Aunque los disturbios suelen ser mínimos, sí se registran
importantes inconvenientes en el tránsito y caos en la circulación a raíz de
los cortes de calle que realizan los estudiantes. Además, en muchos casos los
vecinos suelen radicar denuncias a la Policía o les reclaman que actúen a las
autoridades por ruidos molestos.
En general, el UPD se comienza a celebrar la noche previa al
inicio del ciclo lectivo y se caracteriza porque los alumnos permanecen sin
dormir hasta ingresar a la escuela el día siguiente. El festejo concluye en la
puerta de la institución o en la plaza más céntrica de la ciudad. Entre los
elementos utilizados en el ritual, se destacan las remeras con inscripciones
alusivas, banderas, bombos, disfraces, maquillajes y pirotecnia. (DIB) FD