Avanzan con cambios con trasfondo político en el Tribunal de Cuentas bonaerense

La Plata, mar 13 (DIB).- Tan solo dos meses después de los
nombramientos que completaron su organigrama, el Tribunal de Cuentas bonaerense,
un organismo clave en el control de la gestión del gobierno provincia pero
también de los municipios, se transformó en escenario de una fuerte tensión
política que tendrá hoy su primer capítulo público.

El 4 de enero, cuatro vocales juraron sus cargos: Gustavo
Diez y Ariel Pietronave, que supervisan las cuentas del Ejecutivo provincial
fueron nominados por Cambiemos y Juan Pablo Peredo y  Daniel Chillo, que se ocupan de las
municipalidades, que responden respectivamente al peronismo y al Frente Renovado.

Con ese movimiento, ´fruto de un acuerdo político, el
Tribunal, que preside Eduardo Grimberg, quedó normalizado tras largos meses de
vacancia. Pero cuando todo parecía encaminado, el impulso a un cambio en la
estructura organizaciones elevó la tensión interna y desató alarmas que incluso
se refieren a su independencia.

Es que una de las claves de esas modificaciones, que serán
votadas mañana, es la reapertura de la Secretaria Jurídica, una oficina interna
que estará encargada de evaluar la juridicidad de los fallos que emitan los
vocales y que había sido discontinuada pocas semanas antes del fin del gobierno
de Daniel Scioli, por decreto.

Ahora, la secretaría está contenida en un nuevo organigrama
que será aprobado mañana y que fue presentado por uno de los representantes del
oficialismo, Pietronave, que es cercano al intendente de Lanús, Néstor
Grindetti. La clave es que esa secretaría estará bajo la órbita del “cuerpo”,
como se dice en la jerga interna.

Eso quiere decir que el nombramiento de quien estará al
frente surgirá de la negociación política entre el presidente y los cuatro
vocales y no a partir del mérito técnico de quién ocupe el estratégico sillón,
lo que abre la puerta a que su independencia se vea estructuralmente afectada.

Además, hay otros cambios consensuados. La secretaría de
Modernización pasará a estar controlada también por el cuerpo, por lo que no
dependerá más, como hasta ahora, de la presidencia Lo mismos que as secretarías
de Análisis Técnico y Coordinación de Delegaciones.

Al mismo tiempo, se establecerán cambios en el modo de
selección del personal que se desempeña en el Tribunal. Se trata de un punto
álgido, ya que muchas veces se han denunciado excesos en ese sentido que tiene
que ver con el ingreso de personas con respaldo político, más allá de que
cumplan los requisitos legales.

Los que defienden los cambios, justamente, afirman que
aumentará la transparencia del funcionamiento del organismo, clave en el manejo
de las cuentas de los principales poderes públicos de la provincia, que debe
emitir fallos el próximo 30 de abril sobre el uso de fondos por parte del
Ejecutivo provincial y las comunas. (DIB)