Dictan duras condenas para miembros de una banda que intentó asesinar a comisario

La Plata, nov 11 (DIB).- Una banda fue condenada a penas de
hasta 30 años de cárcel por dos secuestros extorsivos, robos y el intento de
homicidio del ex jefe de la División Antisecuestros de la Policía Federal en
2016, a quien hirieron de un escopetazo en el ojo y le dejaron graves secuelas
durante una persecución en la localidad bonaerense de Villa Martelli.

Fuentes judiciales informaron hoy que el Tribunal Oral en lo
Federal 2 de San Martín aplicó la pena más alta a Carlos Insaurralde, en tanto
que a Daniel Nuñez lo condenó a 24 años, a Ricardo Paz a 18 años y a Oscar Meza
Cardozo y a Lucas Segovia a 15 años, además de declarar a estos dos últimos
reincidentes.

Los jueces Daniel Alberto Cisneros, Walter Antonio Venditti
y Matías Mancini hicieron lugar a las penas que había solicitado en su alegato
el fiscal Alberto Gentili, que trabajó en colaboración con su par Santiago
Marquevich, de la Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (Ufese).

A toda la banda se la halló responsable de los delitos de
secuestro extorsivo agravado por la intervención de tres o mas personas, robo
agravado por haberse cometido en poblado y en banda, amenazas, resistencia a la
autoridad y tentativa de homicidio agravado en el caso del ex jefe de
Antisecuestros de la PFA, comisario inspector Gustavo Santos Díaz (53).

Ese ataque ocurrió el 9 de junio de 2016 cuando Díaz recibió
un escopetazo en un ojo y un brazo en momentos en que encabezaba un operativo
encubierto para detener a esta banda en Villa Martelli y se produjo un tiroteo
durante el cual se registraron unos 80 disparos.

A una semana del secuestro, los autores fueron apresados en
allanamientos realizados en las localidades de José C. Paz, Merlo y San Andrés,
en el noroeste del Gran Buenos Aires.

“Estoy feliz porque se hizo justicia, es un fallo
ejemplar. Estos delincuentes se merecían esta condena por su maldad y su
perversidad, porque cuando salían a cometer algún hecho solamente querían
matar”, dijo a Télam Díaz, quien también elogió la tarea del fiscal
Gentili y la investigación policial.

A raíz de las heridas sufridas, el comisario perdió la
visión del ojo derecho -del cual fue operado cuatro veces- sufrió una
disminución en la fuerza del brazo izquierdo (donde recibió 40 perdigones) y
tiene un dolor incesante en la cabeza.

Al respecto, explicó que uno de los perdigones le quedó
alojado en el cerebro, pero no se puede operar.

“El neurólogo no puede determinar si el dolor constante
es por el perdigón o por el estrés postraumático, así que estoy medicado, pero
el dolor no desaparece por ahora”, explicó Díaz, que está con licencia
médica y no pudo regresar a su trabajo en la Policía Federal.

Otro de los secuestros por los que se condenó a la banda
ocurrió el 9 de mayo de 2016, cuando privaron de la libertad a una pareja que
circulaba por Juana Azurduy al 3000, en Nuñez, y le robaron su auto y otras
pertenencias: a modo de intimidación, al hombre le pegaron un balazo en un
hombro.

En tanto, el 22 de mayo del mismo año, alrededor de las
20.30, secuestraron a un joven en la esquina de Amenábar y Ugarte, en Belgrano
y le robaron su auto, un teléfono celular y otros efectos personales cuando se
dirigía a una cena.

Antes de liberarlo en José León Suárez y sin ningún motivo,
el joven recibió un balazo en su glúteo izquierdo, pero el proyectil siguió su
recorrido y le quedó alojado en el estómago.

En los dos casos, la banda se comunicó con la familia de las
víctimas para intentar cobrar un rescate, pero en ninguno de los dos casos se
concretó el pago.

La banda tenía otros integrantes que todavía no pudieron ser
identificados y por eso el TOF de San Martín remitió testimonios de lo recogido
en el debate a un juzgado federal de San Isidro para que continúe con la
investigación. (DIB)