Conte Grand: “En la provincia se había naturalizado la corrupción”

La Plata, oct 2 (DIB).- El Procurador General de la Corte bonaerense,
Julio Conte Grand, consideró que “en la provincia de Buenos Aires se había
naturalizado la corrupción” al realizar un repaso de la causa que investiga al exjuez
César Melazo, ahora detenido, que según dijo involucra “a toda la estructura de
la sociedad”, como al Poder Judicial, político y a las fuerzas de seguridad.

“Se naturalizó de una manera tenebrosa la utilización de los
mecanismos de poder para la realización de actos ilícitos”, consideró el jefe
de los fiscales en declaraciones a La Nación +. Y sostuvo que es necesario “un
proceso de reinstitucionalización”.

Según destacó, “hay escuchas y testigos que van
determinando la existencia de esta asociación ilícita”. Así, contó que
involucra a integrantes del Poder Judicial en sus distintas áreas: hay un
exjuez de garantías, un exfiscal, un juez de la Cámara de Casación, comisarios,
abogados. Además, hay dos exintegrantes de las barrabravas de los dos clubes de
fútbol locales (Estudiantes y Gimnasia y Esgrima de la Plata) y se investigan
algunas áreas del poder político de la anterior gestión de La Plata.

“Los corruptos lideraron el sistema del Poder Judicial
mediante diferentes mecanismos de captación de la voluntad que impidieron que
el conjunto de la población integrante del Poder Judicial pudiera salir
adelante”, esgrimió el letrado.

También habló de un “un virtual abandono de gestión en
toda la estructura de la provincia”. Y explicó: “Se había concentrado
la gestión en algunos aspectos propios de ciertas actividades desde la
Procuración General, abandonando la gestión en la totalidad del territorio y
dejándola en manos de fiscales, abogados o asesores que, en algunos casos,
empezaron a trabajar de una manera autónoma generándose el feudalismo del
Ministerio Público”.

Conte Grand explicó que lo que sucede es que hay
“grupos feudales en muchas de las estructuras de los 19 departamentos
judiciales, que generan mecanismo de unión y de vinculación con las
departamentales de la policía y con el poder político”. De esta manera se
generaron “triángulos viciosos” en algunos de estos departamentos
que, a su vez, “conformaron feudos que a veces articulaban con el crimen
organizado y otras veces, eran permeables a este crimen”.

Estos triángulos, dijo, están dados por el poder político
(municipios, intendentes y legisladores), la departamental de policía y los
fiscales generales. “Nuestra propuesta fue pasar del feudalismo al
federalismo, respetando las autonomías, pero definiendo una política de gestión
consolidada desde la cabeza del Ministerio Público y haciendo un seguimiento de
gestión estricto”, señaló. (DIB) MCH