La Plata, jul 2 (Por Martín Raggio / mraggio@dib.com.ar) .- El
trompetista Hugo Lobo es el fundador de la banda independiente Dancing Mood y
referente de un particular estilo musical que combina ritmos antillanos,
rocksteady, ska y calipsos. En su larga historia dentro del “rock nacional” fue
capaz de interpretar melodías instrumentales que pueden llegar a ser coreadas
en una cancha de fútbol. También supo
ganarse el lugar para hacerle la segunda a nada menos que al legendario
trombonista Rico Rodríguez de los Skatalites, entre otras satisfacciones.
En su faceta solista en donde pone la firma en forma menos
estructurada que con Dancing Mood, ya tiene tres discos en su haber. Luego de “Street
Feeling” (2015) y “Stay Rude!”(2016), está próximo a salir a la luz los primeros
días de julio: “Neigborhood Rules”, una especie de gusto personal de compartir sus
canciones con cantantes referentes internacionales.
Hugo Lobo charló con DIB sobre el nuevo disco solista, la
importancia de hacer conocer el origen del estilo y su otro proyecto.
¿Cuánto tiempo te llevó la preproducción de “Neigborhood Rules”?
Es un disco que no sé si llevó mucho tiempo, quizás por
alguna característica que tiene se puede decir que sí. En el viaje anterior a
Inglaterra cuando fui a tocar al London Ska Fest, empecé a grabar algunas cosas
con cantantes como Gaz Mayall, Carroll Thompson y yo había ido con las bases
hechas. Fui juntando temas y me fui como cebando y componiendo también. En un
principio la idea era sacar simples en vinilo con un tema de cada lado. Pero al
juntar tantos cantantes y este material tan copado, me decidí por hacer un
disco entero. Esto llevó su tiempo, pero a la hora del armado fueron entre 6 y
7 meses.
¿Qué licencia te da sacar un disco como solista y no como
Dancing Mood?
Son proyectos diferentes, con bastantes diferencias para mí.
Porque a la hora de componer para Dancing Mood es mucho más grande, compongo de
otra manera, para muchos más instrumentistas. Como solista es una banda más
reducida, quizás más rústica y más tradicional del estilo que yo voy buscando.
Con Dancing Mood está más orientando al jazz y en el proyecto solista voy más a
la raíz, un poco más de reggae y de ska jamaiquino, pero más puro. La otra
diferencia es que me doy el gusto de tocar todos los instrumentos que se tocar
(batería, bajo, teclados), menos la guitarra, casi todos los instrumentos.
Quizás sea más fácil, aunque no sé si es la palabra, te diría que diferente,
porque explicarle a otros músicos la idea que uno tiene no es lo mismo que
tenerla en la cabeza para uno mismo. Hay una fluidez, más rápida, quizás esa
sea la licencia que me tomo siendo solista. Pero disfruto de ambas y lo tomo
como que una cosa no reemplaza a la otra, porque son diferentes.
¿Este nuevo trabajo está en la misma línea que “Stay Rude”,
tu anterior trabajo solista?
Está en la misma línea que Stay Rude, pero suena más
tradicional a mi gusto, tiene más temas cantados y está como más maduro, más
afianzada la idea. En este disco encontré el camino que estaba buscando como
solista.
El nuevo material cuenta con la participación de invitados
internacionales, ¿cuál sería la idea?
La idea de tener cantantes internacionales es un enorme
placer, haber podido grabar con gente como Ken Boothe, Lynval Golding de los The
Specials. La idea fue hacer como en Non Stop de Dancing Mood, una sucesión de
temas en forma cronológica de la historia de este estilo de música. Está Boothe
que fue un pionero, está Lynval Golding
que es de la segunda ola del ska pero el que vivió de chico el
nacimiento del ska en Inglaterra cuando llegó de Jamaica, Gaz Mayall que es
quien tuvo que ver con la tercera oleada del ska, quien reivindicó para hacer
conocer a los jóvenes a Prince Buster, Rico Rodríguez, Laurel Aitken que fueron gente muy importante dentro del
género y muy importantes para mí y la idea es ese placer personal. Y también
dar a conocer a los pibes más jóvenes estos monstruos que todavía tenemos en
carrera y explicar un poco de donde viene todo como objetivo. Y como siempre
hice en mi carrera tratar de devolverle esa cortesía intentando traerlos al país.
¿Cómo lo vas a presentar?
Lo voy a presentar íntegramente en septiembre en Capital en
un show diferente, va a ser bastante novedoso, pero no voy a traer artistas
internacionales para la presentación. Y por ahora solamente estoy adelantando
algunos temas despidiendo el disco anterior. Recién a mediados de septiembre
empezaremos a tocar el disco entero. Ni bien lo presento acá como te dije, voy
a tocarlo a Inglaterra y si allí con varios de los músicos que grabaron en el
disco.
¿En qué estadio se encuentra Dancing Mood?
Con Dancing Mood seguimos presentando el disco que sacamos a
fines del año pasado, estamos en ese proceso, tocando bastante seguido y ya
pensando en el nuevo material para largarlo para el año que viene. Estuvimos
tocando mucho por el interior y vamos al “Rock al parque” en Colombia por
primera vez en agosto, bastante movidito también.
¿Cuál fue la mayor satisfacción que te dio la trompeta?
Son muchas las satisfacciones que me dio la trompeta, me
llevó a conocer a mis ídolos, a quienes admiré toda mi vida. Me llevó a
compartir escenario con mi viejo y también me llevó a compartir escenario con
mi hijo. No es una sola cosa, no sé si hay una mayor, me dio muchísimas
satisfacciones.
¿Cómo ves el contexto del país en relación a los que hacen
arte en forma independiente como vos?
Para los músicos independientes de verdad siempre fue un camino muchísimo más
complicado, esté como esté el país, aunque ahora está mal. Todo nos cuesta más
para nosotros cuando decidimos no pertenecer a multinacionales, a compañías por
una decisión propia y esto alarga y estira todo mucho más y hace que uno
trabaje muchísimo más. A nivel país no estamos nada bien. Estamos acostumbrados
a pelearla, no tengo miedo de ensuciarme las manos laburando, que es lo que
hice toda mi carrera. (DIB) MR