La Plata, mar 28 (DIB).- El triunvirato de la CGT convocó al
Consejo Directivo para el 5 de abril a los efectos de iniciar el camino para
llegar a un Congreso Extraordinario en el que se elija a una nueva conducción,
de la cual no participará el gremio camionero.
Así lo consignaron hoy a Télam fuentes gremiales, que
detallaron que la convocatoria fue suscripta ayer por los miembros del
triunvirato, Carlos Acuña, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid.
Allí, convocan a los integrantes del Consejo Directivo para
el jueves 5 de abril, a partir de las 14, en la histórica sede de Azopardo 802.
Esta será -si se computa la anterior convocatoria de fines
de enero pasado, que sirvió para impulsar una fuerte movilización el pasado 21
de febrero- la segunda reunión del Consejo Directivo en lo que va de 2018.
El orden del día tiene previsto el tratamiento de sólo dos
temas: la implementación de los mecanismos estatutarios al efecto de renovar
las actuales autoridades de la CGT; y asuntos administrativos.
La conducción cegetista quedó fracturada a fines de 2017,
cuando se agudizaron los enfrentamientos entre el sector moyanista y el resto
de los referentes de las diversas corrientes internas.
En diciembre, la mayoría de los dirigentes sindicales
hablaban -puertas adentro- de la inminencia de la partida de defunción del
triunvirato, pero las protestas contra la reforma previsional aceleraron los
tiempos y el 20 de diciembre la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) que ocupaba la
secretaría del Interior, (Francisco Gutiérrez), renunció al cargo.
En enero, en el tradicional almuerzo que organiza el
gastronómico José Luis Barrionuevo en Mar del Plata, Hugo Moyano, y los
triunviros Schmid y Acuña, decidieron impulsar por pedido de Pablo Moyano a una
gran movilización el 22 de febrero, fecha que debió ser adelantada tras una
dura polémica porque ese día se conmemoraba la tragedia ferroviaria de Once.
La movilización no fue apoyada por varios gremios entre
ellos los del transporte y ese fue el principio del fin del triunvirato, porque
las descalificaciones y agravios entre los dirigentes sindicales “se
transformó en un patético sainete”, como confió a Télam un veterano
gremialista.
En tanto, en marzo se profundizaron los contactos entre los
diversos sectores gremiales para buscar una salida, mientras Pablo Moyano,
secretario gremial de la CGT en representación de camioneros también pegó un
portazo y abandonó la central obrera.
El problema central entre la dirigencia gremial tuvo que ver
con la inclusión y participación en las últimas protestas cegetistas de las dos
CTA y movimientos sociales, impulsada por Hugo Moyano.
La dirigencia tradicional no digirió nunca el accionar del
camionero y esperó pacientemente, mientras se dedicaba a engrosar sus sectores
gremiales con dirigentes que ya no querían quedar enganchados con los Moyano.
“Gordos” e “Independientes” por un lado
comenzaron a organizar cada vez más encuentros con otros sectores: los gremios
de la CATT, con los del MASA; y los energéticos y parte de las 62
Organizaciones, entre ellos.
Hubo dos cumbres sindicales durante este mes en las que se
sentaron las bases y los acuerdos para iniciar un rápido camino hacia la
normalización de la CGT, donde hasta ahora no participan ni Antonio Caló de la
UOM, ni los mecánicos de Ricardo Pignanelli.
Tampoco fueron invitados a esos encuentros Hugo Moyano y
Luis Barrionuevo, aunque este último ha sido el impulsor a través de Horacio
Valdéz (del gremio del vidrio) de la fractura de las 62 organizaciones que
dirige el ruralista Ramón Ayala, a quien critican ferozmente por defender las
políticas del gobierno nacional.
En ese contexto, pasados los feriados de Semana Santa y el 2
de abril, vendrán la semana próxima jornadas en las que habrá todo tipo de
encuentros para tratar de llegar a la mayor cantidad de acuerdos de cara a la
reunión del jueves, donde le darán forma a la definición de una nueva
conducción cegetista, algo sobre lo que todavía muchos se preguntan si será
antes de junio próximo o ya en el segundo semestre. (DIB)