Cambiemos apura el debate por reforma electoral y quiere discutir el financiamiento

La Plata, mar 4 (Por José Giménez, de Agencia DIB).- Tras el
inicio formal del año parlamentario con el discurso de la gobernadora María
Eugenia Vidal ante la Asamblea Legislativa, el oficialismo pondrá primera en el
debate por la reforma política bonaerense, una amplia discusión que, además de
la revisión del tipo de votación y de la modalidad de las elecciones, incluye
posibles modificaciones en el mecanismo de financiamiento electoral, con la
posibilidad de habilitar la recepción de fondos privados.

Aunque ya se trabaja en un borrador en línea con el
Ejecutivo, la conformación de las comisiones de trabajo de la Legislatura le
dará inicio a un debate de largo aliento, que el oficialismo espera poder
zanjar este año, antes del inicio de la carrera electoral de 2019.

Concretamente, el nudo central de la discusión pasará por
las comisiones de Reforma Política de Diputados y Senadores, que Cambiemos ya
se reservó para sí en una movida estratégica para evitar dilaciones. Es que el
año pasado, con estos espacios controlados por el massismo, varias iniciativas
del oficialismo quedaron truncas por el rechazo de los hombres del Frente
Renovador.

Actualmente trabajan en un primer borrador los senadores
Dalton Jáuregui y Emiliano Reparaz: entre ellos se dirimirá la presidencia y
vice de la comisión en la cámara alta. Ambos electos en 2017, Jáuregui responde
al jefe de Gabinete, Federico Salvai, mientras que Reparaz reporta al
vicegobernador Daniel Salvador, y revistó como su jefe de gabinete desde 2015.

Aunque todavía es un borrador, la reforma pasaría por tres
temas troncales: la revisión del voto con la boleta de papel; la posibilidad de
reemplazar el sistema de Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias; y la
incorporación de cambios en el financiamiento electoral, con la habilitación del
aporte de fondos privados.

Sobre éste último punto, la discusión recién comienza. Un
sector del oficialismo asegura que es necesario un cambio para acompañar las
políticas de “austeridad” que el Gobierno implementó a partir de la eliminación
de cargos políticos o con el recorte del presupuesto para la Legislatura.

Por ello consideran fundamental habilitar el financiamiento
privado, de modo de reducir los aportes millonarios que realiza el Estado en
cada votación, fruto de la ley de PASO que buscaba evitar, luego de la
experiencia de Francisco De Narváez en 2009, que se produzcan grandes
diferencias entre las fuerzas que podían solventar una campaña publicitaria
masiva y otras que no tenían fondos para hacerlo.

En rigor, actualmente la ley permite el aporte de personas
físicas (hasta 692 mil pesos por año en Buenos Aires), pero prohíbe el de
empresas u organismos privados. Por ahora, el Ejecutivo no dio una orden
específica al respecto, y espera ver cómo madura la discusión que a nivel
nacional inauguró esta semana el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, quien
propuso habilitar el financiamiento privado de hasta un 3% de los gastos de campaña.
De todos modos la Provincia tiene autonomía para “desengancharse” de la
discusión nacional y habilitar un régimen propio.

Otro tema que pertenece al ámbito bonaerense y que el
oficialismo estaría dispuesto a tratar es la posibilidad de eliminar los
“pases” de secciones, modalidad que utilizaron la mayoría de las fuerzas
políticas para dirimir internas y evitar que algunos dirigentes valiosos se
queden afuera de las listas. De prosperar esta idea, para poder presentarse por
una sección electoral cualquier persona deberá contar con un mínimo de dos años
de residencia allí.

 

La boleta y las PASO

Por el momento, la principal discusión pasa por resolver la
modalidad de votación, que incluye la posibilidad de reemplazar la boleta partidaria
de papel por un mecanismo de voto electrónico como el que se aplica en la
Ciudad de Buenos Aires y Salta, o la boleta única de papel por categorías como
hoy funciona en Santa Fe.

Otro tema que generará mucha discusión es la necesidad o no
de continuar con el sistema de Primarias, un modelo que en la mayoría de las
elecciones desde su aplicación en 2009 demostró que no cumplió con su propósito
de impulsar internas fuertes en los partidos políticos.

La posibilidad de un reemplazo aún está en discusión, pero
todavía no hay un modelo que convenza al oficialismo. De hecho, las últimas
PASO, aunque obsoletas en cuanto a su objetivo de definir candidaturas, le
sirvieron al oficialismo para trazar un mapa electoral preciso y saber en qué
sectores debía reforzar su presencia para mejorar la performance.

Estas cuestiones, no obstante, estarán atadas a los avances
que haya en el debate a nivel nacional: es que si la Provincia modifica su
sistema electoral independientemente de lo que haga Nación se verá obligada a
desdoblar las elecciones, una opción que hoy no parece convenirle al
oficialismo.

En Diputados se aprobó el año pasado la aplicación de la
boleta única electrónica que ya funciona en Capital Federal y Salta, pero el
tema se trabó en el Senado por el rechazo de los gobernadores. Ahora, con
renovadas fuerzas, Cambiemos podría volver a debatirlo. (DIB) JG