La Plata, ene 12 (DIB).- El bloque de diputados del Frente
Renovador le reclamó hoy a la gobernadora María Eugenia Vidal que intervenga
ante el Ejecutivo nacional para evitar el cierre de la fábrica de explosivos Fanazul
que se encuentra en territorio bonaerense.
A través de un proyecto presentado por los diputados Ricardo
Lissalde y Rubén Eslaiman, el bloque massista reclamó que la mandataria “se
involucre en forma directa en defensa de las fuentes de trabajo en la Provincia”.
“Debemos intervenir y gestionar ante el Estado Nacional la
posibilidad de evitar el cierre desde el poder político central de nuestra
provincia, en defensa de los bonaerenses”, expresó Ricardo Lissalde, diputado
por la séptima sección electoral.
Fabricaciones Militares tomó la decisión de cerrar la
fábrica de explosivos Fanazul, ubicada en la ciudad de Azul, en el centro de la
provincia de Buenos Aires, lo que provocó el despidos de más de 200
trabajadores.
“Entendemos que se debe buscar la eficiencia y la eficacia
en el funcionamiento de una empresa estatal, así como también atender su
viabilidad económica. Pero no coincidimos en que en un contexto en el que la
actividad económica privada está lejos de ocupar mayor cantidad de mano de
obra, más bien también está siendo expulsiva, desde el Estado se tome la
decisión de dejar en la calle a más de 200 empleados en una ciudad de 56.000
habitantes”, señaló Lissalde.
“Este aspecto, el de la pérdida de fuentes de trabajo en un
contexto de crisis, es decisivo para que expresemos nuestras diferencias con el
gobierno nacional, que son diferencias ideológicas sobre cómo concebimos el
Estado, cuál es su rol, cómo entendemos la función del trabajo y del consumo
como motor de la actividad económica de un país y en qué lugar ponemos al
hombre y en qué lugar al mercado cuando pensamos en implementar una medida de
política económica concreta”, resaltó.
Asimismo, advirtió: “Otro aspecto en el que también debemos
expresar nuestra diferencia es que no se trata de una empresa estatal
cualquiera, es una empresa que hace a la defensa nacional y a una cuestión
estratégica de política exterior. Si cierra Fanazul, Argentina debe pasar a
importar explosivos, sin ningún sentido, salvo el beneficio de empresarios
privados”.
“Detrás de cada obrero despedido existe una familia y hay
una historia. No se trata solamente de números con los que los CEOs pueden
jugar para demostrar su “eficiencia” en el manejo de una empresa estatal cuál
mejor empresa privada”, completó el diputado del Frente Renovador.
En los últimos días, en Fabricaciones Militares no se
renovaron 354 de los 1.674 contratos de trabajadores -el 85% del personal está
en esa condición- en las plantas de Fray Luis Beltrán (Santa Fe), Villa María y
Río Tercero (Córdoba) y Azul (Buenos Aires), donde se produjo la mayor parte de
las cesantías, recordaron desde el Frente Renovador. (DIB) MCH