La Plata, ene 28 (DIB).- Una flota
de tradicionales lanchitas amarillas y otras embarcaciones encabezó esta tarde en
Mar del Plata la procesión náutica por los pescadores y marinos desaparecidos
en altamar, que este año incluyó un homenaje a los tripulantes del ARA San
Juan. La ceremonia se desarrolló en el puerto puerto local, al cierre de la 36°
Fiesta Nacional de los Pescadores.
Este año la procesión tuvo una carga
emotiva especial por el impacto que causó en la comunidad el hundimiento del
buque Repunte, ocurrido el 17 de junio de 2017, en el que murieron tres de sus
tripulantes y a otros tres jamás los hallaron.
El homenaje estuvo atravesado
además por la desaparición del submarino ARA San Juan, el 15 de noviembre,
cuando navegaba hacia su apostadero habitual en Mar del Plata con 44
tripulantes a bordo.
Familiares del buque Repunte, que
naufragó durante la captura de langostinos frente a las costas chubutenses de
Rawson, se sumaron a la procesión desde el navío Libertad, que encabezó la
caravana náutica y reiteraron su reclamo por “Ningún hundimiento
más”.
La flota de lanchas amarillas y el
resto de las embarcaciones navegó hasta alcanzar la boca de ingreso al puerto,
donde familiares, colegas y amigos de los desaparecidos en altamar arrojaron
ofrendas florales al agua y elevaron plegarias a San Salvador, patrono de los
pescadores.
Los barcos ingresaron luego a la
zona de maniobras de la Base Naval y se detuvieron frente al muelle donde solía
amarrar el ARA San Juan.
“Creemos en los milagros, pero
también somos profundamente realistas”, dijo el obispo de la ciudad,
Gabriel Mestre, luego de un minuto de silencio y 44 campanadas frente al muelle
vacío.
En la caravana náutica participaron
el presidente de la Sociedad de Patrones Pescadores, Luis Ignoto, y el flamante
jefe de la Prefectura Naval en la ciudad, Raúl Rodríguez.
La ceremonia náutica estuvo
precedida por una misa en la iglesia Sagrada Familia, que continuó con una
procesión en la banquina de los pescadores. (DIB)